Parada de taxis en Sant Antoni de Portmany. | Sergio Cañizares

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La compañía estadounidense Uber ha presentado una queja formal contra España ante la Comisión Europea (CE) después de que la Justicia española prohibiese su aplicación para móviles «UberPOP», que pone en contacto a conductores particulares sin licencia y usuarios de transporte, informó hoy la compañía.

«Creemos que las tres leyes sobre servicios de intermediación en Madrid, Catalunya y Valencia violan el principio del mercado interno de la UE y que también la decisión judicial adoptada en Madrid el pasado diciembre contraviene la legislación comunitaria», dijo este martes el jefe de política de Uber en Europa, Mark Macgann.

La decisión la adoptó el pasado 9 de diciembre un juzgado de lo mercantil de Madrid, que ordenó el cese cautelar de las actividades de Uber y prohibió la aplicación «UberPOP» en todo el territorio español.

Macgann explicó que esta decisión judicial impide también que los usuarios españoles utilicen esta aplicación cuando viajan a países como el Reino Unido, donde sus servicios están permitidos, porque se ha ordenado a compañías como Telefónica, Vodafone y Orange que la bloqueen, una medida que Uber considera una clara violación de la legislación comunitaria.

La compañía considera que las medidas adoptadas contra Uber en España son «desproporcionadas» y «no están justificadas», según el documento de la queja al que tuvo acceso Efe.

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Uber pidió a la CE que inicie un procedimiento de infracción contra España y que, en caso necesario, eleve el caso hasta el Tribunal Europeo de Justicia de la UE, un proceso que, aunque reconocen que puede extenderse meses o años, aumentará «la presión a escala europea» y obligará a los Estados miembros a replantearse su tratamiento legislativo a este tipo de servicios.

La compañía recordó que la decisión del juzgado de Madrid es todavía cautelar, que podrá ser confirmada en las próximas cuatro o seis semanas, en cuyo caso Uber la recurrirá.

«Esperamos que este proceso suponga un impulso y logremos un punto de inflexión en el que los Estados miembros empiecen a plantearse cómo tratar a Uber en lugar de optar directamente por la prohibición del servicio», recalcó Macgann.

La CE, por su parte, aún no ha confirmado que haya recibido la queja, que según la compañía fue remitida a Bruselas este lunes.

«Puedo confirmar que hemos recibido dos quejas contra Francia y una contra Alemania, que están siendo detenidamente evaluadas por los servicios pertinentes de la Comisión», dijo el portavoz comunitario Jakub Adamowicz.

Uber, que está presente en 253 ciudades de 52 países de todo el mundo, 19 de los cuáles son comunitarios, mantiene litigios en España, Bélgica, Holanda y Alemania a raíz de las protestas del sector del taxi, que denuncia que la empresa ejerce una competencia desleal al ofrecer un servicio remunerado de transporte con conductor privado sin tener licencia.