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El líder del PP, Mariano Rajoy, fue el primero de los dirigentes políticos en comparecer en rueda de prensa en la sede nacional del partido para condenar el asesinato del ex concejal socialista Isaías Carrasco de Mondragón (Guipúzcoa) acribillado al salir de su casa para ir a trabajar. «ETA va a ser derrotada. No hay otra posibilidad. No tiene otro final», aseveró el presidente de los populares, que consideró que «ETA debe perder toda esperanza de conseguir sus objetivos políticos porque los españoles no lo vamos a consentir».A este respecto, en su breve declaración sin preguntas, Rajoy remachó: «Todo el mundo sabe lo que yo pienso». El resto de partidos condenó el atentado haciendo a la vez un llamamiento a la unidad.

El líder del principal partido de la oposición compareció en la sede nacional del PP, en la madrileña calle Génova, tras participar en un acto junto a jóvenes de las Nuevas Generaciones del partido en un restaurante muy cercano.

Cuando fue informado, Rajoy tuvo tiempo de cambiar de atuendo y vestirse de negro riguroso para su breve comparecencia ante los medios de comunicación, acto en el que no admitió preguntas de los periodistas.

Así, el presidente del PP comenzó su declaración expresando su condena por el atentado y su solidaridad con la familia de Isaías Carrasco, así como sus amigos, vecinos, compañeros del PSE y «todos los españoles de bien».

«Hoy es un día de luto y todos debemos estar unidos con la familia de Isaías Carrasco, y todo debemos estar unidos y juntos contra ETA», señaló Mariano Rajoy, que subrayó a continuación: «Todo el mundo sabe lo que pienso». Aunque el líder del PP parecía recordar así los mensajes que se han lanzado desde su partido en materia antiterrorista, dejó claro a continuación que «los culpables de este crimen son los terroristas, los asesinos de ETA». En la misma línea, Rajoy insistió en que «la única opción es la derrota de ETA con la ley, los instrumentos del Estado de Derecho, las Fuerzas de Seguridad del Estado y con la insobornable voluntad de los 45 millones de españoles que formamos esa gran nación que se llama España».

«ETA debe perder toda esperanza de conseguir sus objetivos políticos, toda esperanza, porque los españoles no lo vamos a consentir», proclamó el líder del PP, que garantizó, «vamos a derrotar a ETA y los asesinos de Isaías van a acabar muy pronto en la cárcel». «La libertad, los derechos de las personas, sus derechos individuales, volverán a España. Que a nadie le quepa la más mínima duda», aseguró Rajoy, que concluyó remachando: «ETA va a ser derrotada, no hay otra posibilidad y no tiene otro final». Por la tarde, Rajoy viajó en un vuelo privado hasta Mondragón para visitar la capilla ardiente de Carrasco y dar el pésame a la familia.