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El pleno del Tribunal de Cuentas aprobó ayer por una amplia mayoría el informe de fiscalización que pone en cuestión las campañas de publicidad e imagen contratadas por Eduardo Zaplana cuando fue ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, según informó la Cadena SER.

La mayoría de los componentes del Tribunal de Cuentas ha decidido poner en cuestión y denunciar las campañas publicitarias promovidas por el Ministerio de Trabajo bajo mandato de Eduardo Zaplana, actual portavoz del PP en el Congreso, ya que considera que su objetivo era mejorar la imagen gubernamental con un solapamiento con la campaña electoral del 14 de marzo del 2004.

Las campañas bajo sospecha son sobre todo aquellas que iban dirigidas a los pensionistas, que en algunos de los casos coincidieron con periodos electorales.

De los 13 miembros con derecho a voto en el pleno del Tribunal, 10 han votado a favor, incluido el fiscal; dos se han abstenido y sólo uno ha votado en contra, en un pleno con mayoría de consejeros nombrados a propuesta del PP.

El fiscal del Tribunal de Cuentas va a estudiar a partir de ahora este informe porque considera que puede haber indicios de responsabilidad contable por parte de Eduardo Zaplana y e inclcuso alguno de tipo penal.

El Tribunal de Cuentas ha revisado adjudicaciones de contratos por valor de más de 60 millones de euros (10.000 millones de pesetas) gastados, sobre todo, en las polémicas campañas dirigidas a los pensionistas que, subrayaron los técnicos del Tribunal, coincidieron con periodos electorales.

De hecho, la Junta Electoral Central decidió suspender en 2004 las campañas institucionales del Gobierno sobre su gestión, en concreto la difundida por el Ministerio de Trabajo referida a pensionistas y trabajadores autónomos, hasta que terminara el proceso electoral, como habían solicitado PSOE e IU. Zaplana aseguraba que la «campaña era informativa, no electoral».

Eduardo Zaplana aseguró ayer que el plante de diputadas por sus comentarios a la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, estaba preparado por el PSOE. El portavoz del PP en el Congreso afirmó que el PSOE «está más pendiente de las tácticas de márketing que del fondo de los asuntos», y conjeturó que si los socialistas estuvieran «quince puntos por encima del PP no pasarían algunas cosas». En su opinión, el PSOE actúa «permanentemente» para desacreditar al Partido Popular.