Efectivos policiales examinan el lugar de la autopista A8, en las inmediaciones de Ontón (Cantabria), donde hizo explosión un artefacto colocado por ETA.

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La jornada de huelga general convocada por Batasuna, la primera que asume la izquierda abertzale desde el año 2001, tuvo un seguimiento prácticamente nulo. Según el Gobierno vasco, las cifras más altas de repercusión se dieron en el sector de la Educación, estimadas en el 4%. Sí se produjeron en cambio numerosos incidentes, sabotajes y piquetes violentos en diversos puntos del País Vasco y Navarra. Sólo en la Comunidad Foral fueron detenidas ocho personas.

LAB celebró una manifestación a mediodía en San Sebastián, que reunió a unas 2.000 personas con el lema 'No a la dispersión. Euskal Herria adelante'. El sindicato abertzale dijo, pese a las cifras oficiales, que «un montón de empresas han parado todo el día». En esa manifestación hubo nutrida presencia de la ilegalizada Batasuna, liderados por su portavoz, Arnaldo Otegi, quien dijo que esta huelga ha sido «un paso más» para «generar condiciones para un proceso democrático».

ETA quiso estar presente en la jornada de huelga convocada ayer por Batasuna, al hacer estallar dos artefactos, uno en la A-8 a su paso por la localidad cántabra de Ontón y otro en la N-111 por Viana (Navarra), de los cuatro de los que había advertido que explotarían a través de una llamada a DyA de Guipúzcoa. Los avisados en carreteras de Zaragoza y Burgos no han sido localizados.

El artefacto de Ontón, que contenía tres kilos de explosivo, provocó un cráter de dos metros en un camino anexo a la carretera. La segunda explosión, también de pequeña magnitud, se produjo a las diez de la mañana en un camino de la ruta jacobea, cerca de la localidad navarra de Viana.

Miren Azkarate, portavoz del Gobierno vasco, aseguró que el 1% de los trabajadores del Ejecutivo autonómico había secundado la huelga, así como el 0'5% en los servicios de salud y el 4% en la Educación. «Sólo LAB y el entorno de Batasuna se han sumado», dijo. El delegado del Gobierno central en el País Vasco, Paulino Luesma, fue aún más contundente y dijo que la jornada de paro había sido «un clamoroso fracaso» y que «los trabajadores vascos han dado la espalda a la huelga.

Los incidentes violentos que se produjeron a lo largo de la jornada de huelga y la colocación y explosión de varios artefactos en carreteras llevaron al juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska a citar a declarar el próximo lunes al portavoz de la organización abertzale ilegalizada, Arnaldo Otegi, al también dirigente de Batasuna Juan María Olano; al secretario general del sindicato abertzale LAB, Rafael Díez Usabiaga; a la abogada Arantza Zulueta -habitual defensora de presos de ETA-; y a los responsables del partido ilegalizado Juan José Petrikorena y Pernando Barrena.