El inicio de la marcha de Batasuna en Navarra estaba programada a
las 13.00 horas en la plaza de Los Donantes de Berriozar, para
terminar frente al Ayuntamiento. Por la mañana, como medida de
prevención, tanto en las entradas de la localidad como dentro del
pueblo se desplegó un importante número de agentes de la Guardia
Civil y la Policía Nacional, aunque no fue necesaria su
intervención.
Mientras, el PP vasco dijo no entender por qué el presidente del
Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero, responde a los
emplazamientos de una formación ilegal y criticó que se esté
convirtiendo a Batasuna en «un agente político de primer
orden».
El convocante de la marcha, el concejal de Berriozar y ex
parlamentario de Batasuna, Félix Puyo, denunció la «vulneración del
derecho de manifestación», aunque en ningún momento la formación
ilegalizada intentó sacar adelante su convocatoria. Lo cierto es
que el viernes el Tribunal Superior de Navarra ratificó la decisión
de la Delegación de Gobierno de la Comunidad de prohibir la
manifestación de Puyo, que había recurrido la prohibición.
En principio, la convocatoria fue realizada a título particular
por este concejal, pero la Delegación de Gobierno creyó acreditado
que también convocante Batasuna cuando se constató la aparición de
carteles con el lema 'Orain Herria, Orain Bakea' y el titular 'Día
de Batasuna'. El Tribunal Superior de Navarra consideró que «se
puede afirmar sin riesgo a equivocarse que por el formato, fines y
lemas de los carteles, los mismos han sido realizados por Batasuna»
y que en realidad se trataba de una única convocatoria «porque la
única diferencia es que la hecha por el señor Puyo se ha realizado
a través de los cauces legales, mientras que la de Batasuna ha sido
convocada de hecho».
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