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OTR/PRESS-EFE El secretario de Organización y Acción Electoral del PSOE, José Blanco, pidió ayer al PP que destine los recursos «millonarios» que va a usar en su campaña de envío de cartas para explicar la gestión del Gobierno y la posición del partido en la catástrofe del 'Prestige' a los afectados por el vertido, ya que de este modo serán «más útiles». Además insistió en la necesidad de crear una comisión de investigación. Blanco cree que el buzoneo del PP a los ciudadanos defendiendo la gestión del Gobierno y criticando la postura del PSOE es un «insulto» a todos los españoles y «especialmente a los gallegos». Blanco insistió en la necesidad de que se cree una comisión de investigación para que «aflore la verdad», sobre todo una vez conocidas las declaraciones del patrón del barco, en las que, según Blanco, asegura que la decisión de cambiar el rumbo del barco no la tomó él.

Además pidió la comparecencia «urgente» en el Congreso del presidente del Comité Científico, ya que la sociedad necesita «confianza en lo que se hace» y saber que las labores que está realizando el batiscafo «no son parches sino soluciones». Por otro lado, Blanco presentó un informe realizado por su partido sobre el tratamiento de la catástrofe del Prestige en TVE y acusó a la cadena pública de «haber faltado a la verdad en muchas ocasiones y ocultado información en otras» y aseguró que se ha ejercido la censura y no se ha respetado el pluralismo político y social.

En su opinión, ese intento desesperado de ocultar los hechos «no tiene precedente en ningún país democrático» añadiendo que no se puede tratar de convencer a la Unión Europa de que el vertido del Prestige ha sido una «gran catástrofe» cuando el Gobierno ha tratado en TVE de minimizar y negar durante 15 días esa «tragedia». Por su parte, el coordinador de Comunicación del PP, Rafael Hernando, pidió al PSOE que deje de «poner zancadillas» y «echar la mano al cuello» al Gobierno de Aznar por la gestión de la catástrofe y acuse a los «verdaderos» responsables del vertido, «el armador, el capitán y las sociedades instrumentales que participan en tráfico de fueles con buques que no tienen ningún tipo de seguridad».

Precisamente el capitán del 'Prestige', Apostolos Mangouras, defendió al inicio de la crisis que hubiera sido mejor fondear el barco en la costa que alejarlo, como decidieron al final las autoridades españolas. Mangouras pidió que el petrolero fuera anclado a 4 kilómetros de Muxía. Así lo declaró ante el juez de instrucción de Concurbión, según informó ayer 'La Voz de Galicia'.