TW
0

La Agencia Tributaria calcula que 76 de cada cien declaraciones del IRPF pedirán a Hacienda devolución en la próxima campaña de la renta, cuyo plazo comienza mañana y termina el 1 de julio, según el director general de la AEAT. Ruiz Gallud informó ayer sobre la campaña de la renta, «la primera de la historia en euros». Según sus datos, Hacienda prevé ingresar este año un total de 4.684'22 millones de euros, pero tendrá que devolver a los contribuyentes 7.779 millones.

El resultado será una cuota diferencial negativa para el Fisco de 3.094'77 millones de euros, que implica que la AEAT tendrá que devolver a los contribuyentes 21 millones de euros menos que en la campaña anterior, cuando la cuota diferencial neta fue también negativa y alcanzó los 3.116'62 millones de euros.

Gallud justificó el número «relativamente alto» de devoluciones previsto al «importante» número de contribuyentes con deducciones por compra de vivienda (unos cinco millones) y de personas con planes de pensiones (unos 2'5 millones). La Agencia Tributaria calcula que en esta campaña se presentarán algo más de catorce millones de declaraciones de IRPF, lo que supondrá un 4'3% más que en la anterior, en que se presentaron 13'45 millones. Hacienda prevé que más de 10'72 millones de las declaraciones presentadas en esta campaña tendrán derecho a devolución, mientras que 3'2 millones serán positivas y otras 106.922 negativas o de otro tipo (en que los contribuyentes no piden devolución).

En cuanto a plazos, pronostica que más del ochenta por ciento de los contribuyentes con derecho a devolución habrá recibido el dinero correspondiente antes de finales de julio, y la mitad de esos contribuyentes con derecho a devolución antes de ese mes. Gallud cifró en menos de veintiocho días el plazo medio de devolución previsto, frente a ejercicios anteriores donde los tiempos de devolución eran mucho más elevados. Entre las novedades de esta campaña, destacó que medio millón de matrimonios se beneficiarán de la compensación de cuotas, de modo que cuando una de las declaraciones resulte a ingresar y la otra a devolver, se puede solicitar la suspensión del ingreso en la cuantía máxima que permita la devolución al cónyuge, siempre que éste renuncie al cobro de la misma, agilizándose así la devolución.