Celia Villalobos tras el Consejo de Ministros junto al portavoz del Gobierno, Pío Cabanillas.

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EFE/OTR-MADRID La ministra Villalobos aseguró ayer que el proceso de elaboración que provoca la aparición de «alfabenzopirenos» en el «aceite de orujo de aceituna» data de hace solo tres años, y que, dado que «no es un veneno» sino que debe haber «acumulación a largo plazo» para producir efectos cancerígenos, el mensaje a los consumidores debe ser «de absoluta tranquilidad». No obstante, la ministra insistió en que su departamento «ha actuado correctamente» al poner en marcha la red de alerta sanitaria e inmovilizar el aceite de orujo porque «en salud pública no hay otra opción» cuando existen análisis y evidencias científicas de la presencia de una sustancia dañina para la salud.

Villalobos explicó que la decisión la tomó ella y consideró que «no tenía que llamar al presidente del Gobierno que estaba fuera de España; no vi necesidad de alarmar al presidente sobre algo que no era alarma social y no conllevaba peligro para los ciudadanos». Preguntada si dimitiría en el caso de que se causen prejuicios al sector olivarero, la ministra contestó que no tienen por qué producirse. Explicó que la decisión la adoptó ante los informes de Agricultura sobre los resultados del análisis de once muestras de aceite de orujo en las que los niveles de benzopireno estaban entre 8'5 y 89'4 microgramos cuando la ingesta máxima tolerable para la salud humana es de dos microgramos por litro.

Aseguró que esos datos los tuvo el mismo día que activó la red de alerta, el 3 de julio, motivo por el que no pudo anunciar la inmovilización cautelar a los consejeros de Sanidad en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud celebrado el sábado anterior. No obstante, el Ministerio de Agricultura, cuyo titular es Arias Cañete, anunció que había remitido el informe a Sanidad el 21 de junio, y no el 3 de julio. Es más, el día anterior, el 2 de julio, tuvo una reunión con los productores en la que le pidieron 20 días para retirar el material.

Villalobos aseguró ayer que durante la reunión no tuvo ninguna constancia de problemas con el aceite hasta el día siguiente, cuando recibió un informe elaborado por el Ministerio de Agricultura y activó la Red de Alerta. Las contradicciones de la ministra ponen en evidencia la descoordinación con el ministro Cañete. A su juicio, el PSOE ha actuado con «enorme irresponsabilidad» en este asunto y añadió que no comparecerá a petición propia ante el Congreso de los Diputados a dar explicaciones. La Comisión Europea informó ayer de que «ningún Estado miembro» ha anunciado medidas contra las exportaciones de aceite de oliva español de ningún tipo, tras las explicaciones ofrecidas por las autoridades españolas, que a su vez han recomendado al resto de los Estados miembros que retiren del mercado todas las partidas de aceite de orujo.