El presidente del Euskadi Buru Batzar del PNV, Xabier Arzalluz,
señaló ayer que la propuesta de reforma del Código penal que
pretende el PP sólo es un apunte más de «la política del adoquín»
de José María Aznar que «sólo entiende de represión» y cae en el
error «en el que ya cayeron otros» de crer que con represión se
puede acabar con la violencia.
«Yo considero que Aznar de lo que no entiende es de
flexibilidad, de cintura, de oportunidad política, y carga siempre
por lo mismo. Es la política del adoquín. Dureza, dureza, dureza».
Para el dirigente abertzale, el Gobierno del PP ha tenido
oportunidades de actuar «de verdad» por ejemplo durante el año y
medio que duró la tregua de ETA. «Cuando éstos dicen, el señor
Aznar y compañía, que dejen de matar y luego hablaremos. Pues
estuvieron año y medio sin matar y, ¿de qué hablaron?».
Arzalluz asegura que el PP está presionando con dureza al nuevo
líder del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, para que no cambie la
estrategia que han venido manteniendo los socialistas de apoyo
incondicional a la política de Aznar en lo relativo a la cuestión
vasca. A pesar de las presiones, ve posible llegar a acuerdos con
el PSOE, porque está en un momento clave y necesita alejarse de la
política represiva del PP.
Arzalluz dijo haber detectado en las filas socialistas «un
intento de ir separándose del tutelaje que hasta ahora ha tenido su
partido y los líderes anteriores respecto al PP y la política del
PP en el tema vasco». «Lo que pasa es que no se pueden dar saltos,
no se puede de un día para otro cambiar la política porque hay una
opinión muy creada y muy manipulada. Pero él se va a separar, lo
necesita», aseguró.
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