Dos guardias civiles, asesinados con coche-lapa en Huesca

AGENCIAS. Dos guardia civiles han muerto esta mañana en un atentado atribuido a ETA contra un coche patrulla en Sallent de Gállego, un pueblo de 500 habitantes en la provincia de Huesca, según la subdelegación del gobierno. El atentado tuvo lugar a las seis y diez de la mañana. Una bomba-lapa colocada bajo el vehículo hizo explosión en el momento en que los agentes subían a él para comenzar su ronda matinal, informó un portavoz de la subdelegación del gobierno. Los guardias civiles fallecidos fueron identificados como Irene Fernández Pereda y José Angel de Jesús Encinas, informó la Delegación de Gobierno en Aragón. Las misma fuente confirmó que, como consecuencia de la explosión, la mujer, de 32 años, falleció en el acto y el hombre cuando era trasladado al Hospital San Jorge de Huesca. «Una enorme explosión resonó en todo el pueblo y se formó un hongo de humo. El coche fue destruido completamente», explicó a Radio Nacional de España (RNE) el alcalde del pueblo, José Luis Sánchez. El cuartelillo de la guardia civil de Sallent de Gállego, un pueblo del Pirineo aragonés, ya había sido objeto hace tres años de un atentado de ETA que causó varios heridos leves y daños materiales. Con la muerte de los dos guardias civiles asciende a 11 el número de víctimas de ETA después que la organización armada anunció en diciembre de 1999 el fin de la tregua ilimitada que observaba desde septiembre de 1998.