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Repsol subió ayer dos pesetas el precio de todas sus gasolinas y una el del gasóleo de uso automovilístico, mientras que Cepsa incrementó los de todos sus carburantes una peseta y BP dos pesetas todas sus gasolinas, excepto la sin plomo 98, y una el gasóleo. Fuentes del sector consultadas consideran que la coyuntura actual puede hacer, «casi con toda seguridad que con carácter inmediato los precios vuelvan a subir otras dos pesetas». Las mismas fuentes señalaron que mientras sigan las tensiones de precios en los mercados internacionales y la alta paridad del dólar (divisa en la que se abona la factura energética) frente al euro «será casi imposible que haya estabilidad de precios y de momento no parece que esta situación tenga visos de tranquilizarse».

Tras la quinta subida que aplica Repsol en lo que va de mes, el litro de la sin plomo de 95 octanos alcanza un máximo de 137'9 pesetas, el de la de 98 octanos se sitúa en las 151'9 pesetas y el de la súper tradicional en las 147'9 pesetas, mientras que el gasóleo de uso automovilístico, que permanecía sin variaciones desde el 7 de marzo, sube a las 112'9 pesetas.

Por su parte Cepsa, que controla el 25 por ciento de las estaciones de servicio abiertas en España, sitúa los máximos de sus carburantes en 136'9 pesetas en el caso de la gasolina sin plomo de 95, en 150'9 en el de la superstar y en 146'9 el de la súper tradicional, en tanto que el litro del gasóleo de uso automovilístico alcanza un tope de 113'9 pesetas.

British Petroleum (BP), tercera petrolera que opera en España con una cuota de mercado del 10 por ciento, cerró el día con un incremento de dos pesetas en el precio de sus gasolinas, excepto el de la sin plomo de 98 octanos que se mantiene en las 149'9 pesetas, y una peseta el del gasóleo de automoción. BP sitúa el precio máximo de su gasolina sin plomo de 95 octanos en las 137'9 pesetas, el de la súper tradicional en las 147'9 pesetas y el del gasóleo de uso automovilístico en las 113'9 pesetas litro.

A finales de año pasado, Repsol vendía la sin plomo de 95 a un máximo de 124'9 pesetas, lo que ha fecha de hoy supone un incremento de 12 pesetas, mientras que el máximo de la súper era de 129'9 pesetas, 18 pesetas menos que ahora, y el del gasóleo se situaba en las 105'9 pesetas, 7 pesetas menos.

La Unión de Consumidores de España (UCE) manifestó su malestar ante estas subidas y dijo que los consumidores españoles son los más perjudicados por el encarecimiento de los carburantes y que soportan subidas superiores a las que se producen en otros países de Europa. La UCE «reprocha» a las petroleras su política de aumentos continuos en los precios de los carburantes, «rechaza» los argumentos que estas esgrimen para justificar ese aumento, y considera que «el Gobierno tiene una gran cuota de responsabilidad sobre la situación al no haber instrumentalizado adecuadamente la liberación».