El lehendakari Ibarretxe realizó ayer un llamamiento institucional a la unidad ante la manifestación de hoy en Vitoria.

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El presidente del Gobierno vasco, Juan José Ibarretxe, ha convocado a los vascos a expresar su rechazo de los asesinatos de Fernando Buesa y Jorge Díez bajo el lema «Bakea behar dugu (necesitamos la paz). Respeto a la vida. ETA gelditu (ETA para).

Este lema, a juicio de los socialistas, es «interpretable», según dijo ayer su secretario general, Nicolás Redondo, que anunció que hoy formarán un bloque encabezado por una pancarta con las frases «Basta ya. ETA no» que cubrirá el mismo recorrido.

Durante la jornada se han mantenido diversos contactos para estudiar las posibilidades de reconducir la situación y para que los ciudadanos no tengan que optar por cada bloque, pero sin éxito. La polémica en torno a la celebración de la manifestación llevó incluso al ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, a decir que sería un «escándalo» que los partidos nacionalistas y los no nacionalistas fueran juntos a la misma, ya que supondría «un fraude» manifestarse junto a quien, a su juicio, «políticamente está con ETA».

Ante esta situación, el lehendakari Ibarretxe pidió ayer que quien acuda hoy a la manifestación «lo haga de buena fe, sin buscar polémicas, con sentimiento, con sinceridad» y mostró su respeto por «todos los planteamientos, especialmente los de aquellos que no estando de acuerdo con la convocatoria decidan, legítimamente, no acudir a la misma».

Ibarretxe consideró que la manifestación tiene una convocatoria «clara, con un lema y unos objetivos también claros», apreciación que no comparte Redondo, que defendió ayer que se deben expresar «ideas claras y lo que la inmensa mayoría quiere decirle a ETA es 'basta ya' y 'ETA no'», y no que sólo pare.

Redondo explicó que para los socialistas vascos los actos fúnebres celebrados por el asesinato de Fernando Buesa ya eran «suficiente expresión democrática de la sociedad contra ETA y los asesinatos» de su compañero y del ertzaina que lo escoltaba y que no hacía falta una nueva manifestación.