La Policía francesa descubrió ayer en la Avenida Dufant de la
localidad francesa de Pau el piso donde vivieron hasta su detención
el pasado 25 de octubre, los miembros de ETA Belén González Peñalva
y Cipriano Fernández, según confirmaron fuentes policiales. En el
registro, la Policía francesa se incautó de diversa documentación
política y operativa de ETA, que medios antiterroristas consideran
muy relevante, teniendo en cuenta que Belén González Peñalva, formó
parte de la delegación etarra que se entrevistó con el Gobierno en
Suiza.
El arresto de González Peñalva levantó una agria polémica entre
las formaciones políticas, después de que el Consejero del Interior
vasco, Javier Balza, declarase que su detención podría afectar al
proceso de paz. A raíz de estas declaraciones del responsable
vasco, el Partido Popular presentó una moción de censura en el
Parlamento vasco contra Balza que no prosperó.
El piso, que fue alquilado en el mes de septiembre, un mes antes
del arresto de González Peñalva y su compañero, por una pareja que
se presentaron como mexicanos, comenzó a ser registrado durante el
día de ayer por efectivos de la División Antiterrorista,
desplazados desde París, después de que el dueño del inmueble
denunciase la falta de pago del citado piso.
La Policía francesa sospecha que en la casa podía vivir otra
tercera persona, además de González Peñalva y Cipriano Fernández,
ya que había tres dormitorios.
La detención de los dos etarras se produjo el 25 de octubre,
cuando se encontraban dentro de un Renault Clio, que estaba
estacionado en un lugar no permitido. Tras darse a la fuga y ser
perseguidos, fueron arrestados, aunque por el camino trataron de
deshacerse de algunos documentos.
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