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«No sólo hay un apoyo del Gobierno a la posición de la compañía Iberia y, por tanto, un claro apoyo a su gestión y a los criterios que se han seguido, sino que el Ejecutivo asume esa oferta como la última y definitiva». Con estas contundentes palabras se refirió ayer el portavoz del Gobierno, Josep Piqué, a la oferta de la compañía de bandera para solucionar el problema con sus pilotos, confiando en que se pueda acordar lo que al Gobierno le parece «absolutamente razonable», una negociación que pasa por «permitir que se cumpla ese gran y ambicioso objetivo que es hacer de Iberia una de las compañías aéreas más importantes del mundo».

Entretanto, fuentes del SEPLA, reunido desde primeras horas de la manaña de ayer para reflexionar sobre la oferta, aseguraron que la decisión de convocar una huelga esta «aparcada».

APOYO DEL GOBIERNO
El ministro de Industria y Energía Josep Piqué aseguró ayer tajantemente que «como ya reflejaban ayer los medios de comunicación, el Gobierno apoya claramente la última oferta que ha hecho la compañía Iberia para resolver su conflicto con el colectivo de pilotos».

A renglón seguido añadió que, él mismo se encargó el pasado jueves de transmitírselo a los dirigentes del Sindicato de Pilotos de Líneas Aéreas (SEPLA). En esta sentido, sostuvo que el Ejecutivo «espera» que los pilotos entiendan esta posición «de forma clara para que se pueda cerrar el conflicto en beneficio de todos; de los ciudadanos en su conjunto, de la compañía Iberia, y, por tanto, de todos sus trabajadores, incluidos los pilotos, lo antes posible».

Por ello, ante el plazo dado a los pilotos para que contesten sobre la oferta puesta sobre la mesa "cuestión que, a juicio de Piqué, ocurrirá este fin de semana o la semana que viene ante la dificultad del colectivo para reunirse dadas las características de su trabajo", explicó que «no tiene ningún sentido anticipar qué tipo de actitud tomará la compañía y el Gobierno en el caso de un recrudecimiento del conflicto». Precisamente en este punto se refirió el portavoz del Gobierno a las amenazas del SEPLA de volver a la huelga, tal y como hiciesen la pasada Semana Santa. Sin embargo, fuentes del sindicato aseguraron que esta decisión está «aparcada», a la vez que adelantaron que «probablemente» no se alcanzase una resolución acerca de la oferta de Iberia en el primer día en que se sentaron a estudiarla detenidamente.

La «única y última» oferta de la aerolínea consiste en una paga extra a 1.400 miembros de 700.000 pesetas, que no se incluirían en la nómina, como una compensación por los esfuerzos realizados durante el plan de viabilidad del año 1994 y a causa de los buenos resultados obtenidos de este ejercicio.