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El ex ministro del Interior José Barrionuevo y el ex secretario de Estado para la Seguridad Rafael Vera abandonaron ayer la prisión de Guadalajara, donde cumplían condena por el secuestro de Segundo Marey desde el pasado 10 de septiembre. Su salida de prisión se produjo escasas horas después de que el Tribunal Constitucional acordara la suspensión de sus penas referentes a la privación de libertad hasta que resuelva sus recursos de amparo. El alto tribunal seguía así su propia doctrina de suspender cautelarmente la ejecución de las condenas inferiores a cinco años.

El Constitucional ha rectificado así su primera postura desfavorable a la excarcelación cautelar de los ex altos cargos de Interior que hizo pública el pasado 26 de noviembre. Este cambio de opinión, ha sido posible con la nueva situación de los condenados, ya que, al haberles concedido el Gobierno el indulto parcial, han visto reducidas sus penas de cárcel de los diez años iniciales a tres años y cuatro meses, quedando así sus condenas por debajo de los cinco años de prisión que el Constitucional fija habitualmente como límite.

La medida afecta también a otros tres condenados por el «caso Marey»: el ex secretario general de los socialistas vizcaínos Ricardo García Damborenea, el ex director de la Seguridad del Estado Julián Sancristóbal y el ex jefe superior de la Policía de Bilbao Miguel Planchuelo. Los cinco, que el lunes volvieron a la cárcel tras sus primeros permisos después de la concesión del indulto, pasaron la noche en prisión sabiendo que podía ser la última, como así ha sido.

«Entramos en esta cárcel siendo inocentes y salimos igualmente siendo inocentes»
Estas fueron las palabras con las que el ex ministro del Interior José Barrionuevo se despidió de la cárcel de Guadalajara. Hablaba en su nombre y en el de Rafael Vera, que como él ha pasado 106 días en la prisión alcarreña.

«Entramos injustamente (en prisión) en virtud de una decisión sin pruebas, condenándonos por algo que no hemos hecho», reiteró el ex ministro, que también aprovechó para agradecer el apoyo recibido, especialmente de las Juventudes Socialistas.

El ex ministro dijo que espera que la salida de la cárcel sea un primer paso para que se reconozca su inocencia, y, sobre su estancia en prisión, señaló: «Igual tenemos que escribir un libro».