La vivienda se encarece un 30 por ciento en solo nueve años

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El recalentamiento de los precios inmobiliarios se refleja en las cifras que no paran de incrementarse. «Entre 2015 y 2022 el precio de venta y de alquiler de la vivienda se incrementó un 30 por ciento de media en Balears, aunque en ciertos municipios se superó esta cifra, según Luis Escudero Gómez, profesor de Geografía Humana de la UIB. «La gente no se irá de la Isla pero la situación se agravará. Hay que tomar decisiones políticas. Ha llegado un punto en el que alguien tendrá que regular. Con la vivienda de uso turístico ya se hace. PP y Vox tampoco reniegan del problema, pero hay que dirigir su mirada hacia el mercado», señala el doctor en Geografía Humana.

Según el informe de Servihabitat, en el tercer trimestre del año pasado el 33 % de las compraventas de Balears se llevaron a cabo por extranjeros, mientras que la media nacional es del 15,4 %. La Asociación de Constructores de Balears advierte que llevan 15 años sin pasar de las 4.000 viviendas construidas anualmente cuando lo ideal, según la demanda existente, sería llegar a las 7.000. Eso sí, «lo que se está construyendo no es una vivienda a precio asequible», según la directora general de la asociación, Sandra Verger.

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Por su parte, Hans Lenz, presidente de Asociación Balear Inmobiliaria Nacional e Internacional (ABINI), advirtió que «esto se venía venir y es lamentable. Es necesaria la protesta, es una llamada de auxilio». Lenz asegura que la demanda extranjera «solo es una pieza del puzzle pero también ha habido una falta de previsión del aumento de la población y tenemos el parque de vivienda social más pequeño de Europa. En 20 años no se ha trabajado de manera consensuada».

El portavoz de ABINI mostró su «total apoyo a las protestas. Tiene que crearse vivienda social pero falta suelo asequible». Otro asunto es la descapitalización de las familias mallorquinas con las ventas masivas a precios escandalosos. «La independencia de los jóvenes se dificulta y las propiedades y el patrimonio familiar se va vendiendo. Es cierto que la situación sería más grave si no hubiera trabajo», dice Escudero.