Adió a las ayudas. Quien quiera comprar una bicicleta eléctrica o un patinete se queda sin subvención a partir de ahora. El Govern deja de pagar entre 275 y 900 euros por vehículo. | Gemma Marchena

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Se acabaron las subvenciones para la compra de patinetes y de bicicletas eléctricas. El Govern ha decidido suspender de manera fulminante la concesión de estas ayudas a la espera de que las administraciones de las islas, sobre todo SFMy la EMT, tomen una decisión definitiva acerca de si se podrán transportar estos medios de transporte en los vehículos públicos.

La Conselleria d’Empresa informa de que, hasta entonces, las nuevas ayudas quedan congeladas. Se seguirán pagando las peticiones que ahora estén en tramitación, pero no se abrirá una nueva línea de ayudas, según las fuentes de la Conselleria.

El Govern de Francina Armengol aprobó el mes de abril del año pasado una partida de un millón de euros para el impulso de la movilidad compartida y la micromovilidad. En la convocatoria, el Govern apuntaba a la necesaria la implicación de todos los sectores para seguir con una transición energética en las Islas. Uno de los aspectos más polémicos de las ayudas es que se concedían con cargo a la ecotasa. Parte de la recaudación del impuesto de turismo sostenible se destino a la subvención de la compra de estos elementos de movilidad personal.

Transporte más eficaz

El Govern defendía que se trata de una buena alternativa para contribuir en un grado muy importante a un transporte más eficiente y sostenible, además de a la pacificación del tránsito y la descongestión de vehículos en las zonas urbanas.

En concreto, el Govern ha estado dando hasta 200 euros por la compra de un patinete (275 en casos de modelos de movilidad reducida ) y 600 para la adquisición de bicicletas (900 para las de movilidad reducida). El coste de adquisición de la bicicleta eléctrica no podía ser superior a 2.000 euros, excepto para bicicletas adaptadas para personas con movilidad reducida que podía ser de hasta 3.000 euros. Por lo que se refiere al patinete eléctrico no podía ser superior a 700 euros, excepto para patinetes adaptados para personas con movilidad reducida que puede ser de hasta 1.000 euros.

Estas ayudas provocaron una gran polémica hasta el punto de que ARCA presentó un recurso al considerar que los vehículos pueden incidir en la inseguridad colectiva y además estimaban que no era adecuado que se pagara con fondos de la ecotasa.

La suspensión de estas ayudas coincide con los cambios en la ley de la ecotasa que se han aprobado en la ley de Presupuestos. El dinero del impuesto podrá destinarse a políticas de transición energética, pero el Govern no considera adecuado que se financien programas como el de la compra de patinetes. Lo que sí está claro es que el dinero del impuesto de turismo sostenible no servirá para financiar la construcción de vivienda, algo que sí incorporó el pacto.