Antònia Maria Estarellas en una imagen reciente. | Jaume Morey

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La consellera de Presidencia y Administraciones Públicas, Antònia Maria Estarellas, ha asegurado que el Govern implantará «otro modelo» diferente de la Oficina Anticorrupción para la rendición de cuentas. Así lo ha indicado la representante del Ejecutivo balear durante una intervención en el pleno del Parlament, en la interpelación de la diputada del PSIB Pilar Costa sobre transparencia y en la que le ha preguntado acerca del futuro de este organismo. Costa ha criticado que la proposición de ley del PP para la eliminación de la Oficina Anticorrupción deja en «un limbo» a los trabajadores y los expedientes que tramita la oficina o que el Govern «desprestigie» su labor.

Sobre el argumento esgrimido por el PP de que solo «persigue actuaciones contra ellos», ha alegado que es «falso» puesto que de 80 expedientes que hay bajo investigación, 61 afectan a los partidos del anterior Ejecutivo --PSIB, MÉS per Mallorca y Unidas Podemos-- y 19 al PP. En cuanto a la supuesta duplicidad de trabajo con la Fiscalía, Costa ha aclarado que ésta investiga ilícitos penales, mientras que la Oficina no tiene porqué resolver que hay una actividad delictiva y en caso de detectarla, envía el expediente al Ministerio Fiscal. Por lo que se refiere al ahorro de costes, la diputada del PSIB ha defendido que los 1,5 millones de euros que se destinan a la oficina representan el 0,02 del presupuesto de Baleares y con su eliminación no se eliminará todo gasto, ya que hay funcionarios que tendrán que ser recolocados.

«No le ha preocupado que se filtre un expediente a la prensa»

En el turno de réplica, Estarellas ha censurado que ante la supuesta «preocupación» que ha mostrado Costa por la transparencia, «no le ha preocupado que se filtre un expediente a la prensa», ya que «no ha dicho ni una palabra» y ha incidido en que el personal de la oficina está sujeto a la «cláusula de confidencialidad». Asimismo, ha apuntado que el Govern aboga por una gestión «eficaz, transparente y ética de los asuntos públicos» y ha destacado que todos los miembros del Ejecutivo balear «se han adherido al código ético aprobado la pasada legislatura».

Por lo que se refiere al gasto público de la Oficina Anticorrupción, ha afirmado que los ciudadanos están «cansados de chiringuitos que aportan o solucionan poco». También ha criticado el cese del anterior director de la oficina, Jaume Far, que había iniciado investigaciones por la vacunación de altos cargos del Govern o la supuesta malversación de fondos en la anterior Conselleria de Medio Ambiente y Territorio. Estarellas ha insistido que la Oficina Anticorrupción ha investigado casos que finalmente ha enviado a los organismos competentes para que «investiguen lo mismo».

Seguidamente ha ofrecido algunos datos de los expedientes tramitados por la oficina, en total 107, cinco de los cuales han acabado en manos de las autoridades competentes, por lo que cada ha subrayado que cada informe sale a más de 120.000 euros. La consellera ha finalizado su alegato defendiendo que la oficina es «un chiringuito» que busca «beneficios políticos» en «detrimento de los intereses de los ciudadanos».