El 'raor' es una especie de gran tradición pesquera en Baleares y muy valorada a nivel culinario. Foto: ENEKO ASPILLAGA.

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Un grupo de investigadores del Institut Mediterrani d’Estudis Avançats (Imedea) y del Centre Nacional d’Anàlisi Genòmica de Barcelona ha conseguido descifrar las piezas que conforman el código genético del raor (Xyrichtys novacula).

Se trata de un proyecto de gran impacto para la biodiversidad del territorio y la conservación de la especie marina. La investigación, que ha permitido obtener el primer genoma a escala cromosómica de esta especie, supone un paso adelante para entender el papel de la biología molecular en la conservación de los recursos pesqueros.

El raor es una especie muy valorada y conocida, pero es poco habitual que se hable de las características de comportamiento que hacen de ella una especie científicamente relevante. El raor es un pez que se haconvertido en todo un icono, especialmente por la tradición de su pesca en Balears y su alto valor culinario.

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Menos conocidas son sus particularidades de comportamiento y genéticas. Al igual que los humanos, los raors incorporan a su comportamiento cronotipos, es decir, preferencias individuales por los horarios en los que realizan sus actividades diarias, hecho que hace que haya ejemplares activos a una hora más temprana que otros.

Además, se ha observado que tienen ciertos comportamientos sociales en los que los machos más agresivos defienden enérgicamente grandes parcelas de fondo arenoso que incluyen los territorios más pequeños de las hembras de su harén. Estas peculiaridades comportamentales están codificadas genéticamente en el resto de animales, incluidos los humanos.

Los raors tienen un cromosoma más que los humanos, a pesar de que la medida total de su
genoma es más reducida. Su información genética se encuentra codificada en aproximadamente 780 millones de unidades, mientras que en los humanos se ha estimado en 3.200 millones.

Otra peculiaridad de esta especie es su carencia de cromosomas sexuales. Los raors no tienen esta diferencia cromosómica, puesto que son hermafroditas secuenciales. Esto quiere decir que todos los raors nacen con sexo femenino y, pasados unos años, se convierten en machos. Este cambio está regulado por varios factores genéticos que varían en un momento determinado.