Palma cuenta con varias zonas para disfrutar del ocio nocturno.

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Palma es fiestera. La esencia de la vida nocturna en la ciudad se mantiene también en invierno, cuando los residentes aprovechan los días festivos en Navidad para disfrutar del ocio con amigos. La capital mallorquina cuenta con hasta ocho zonas de marcha repartidas por el casco urbano de la ciudad y los alrededores de la misma, pasando por diferentes lugares céntricos como la calle Blanquerna o Santa Catalina, extendiéndose hasta el Paseo Marítimo y Porto Pi, hasta llegar a los polígonos industriales. De esta forma, las áreas de restaurantes, pubs y discotecas de Palma y alrededores se distribuyen de la siguiente manera, tal y como muestra el mapa de las mejores zonas de marcha:

Zonas de copas y discotecas

Treinta años atrás, las zonas de marcha por excelencia en la capital mallorquina eran La Lonja y la Plaza Gomila. En el primer caso, la aprobación del decreto contra la contaminación acústica limitó la fiesta y la apertura de terrazas, reduciendo notablemente la oferta de ocio. En el segundo caso, la fiesta se ha desplazado de la Plaza Gomila hacia el Paseo Marítimo. «Ya no es el boom de antes», recalca Miguel Pérez, presidente de la Asociación Balear del Ocio Nocturno y Entretenimiento (ABONE), tras el cierre de míticos locales de la zona como Tito's o el Club de Mar (ahora, cerrado por obras). Pese a ello, multitud de discotecas y pequeños locales de copas se extienden a lo largo de casi un kilómetro, en primera línea de playa, acogiendo en invierno y verano a un público joven, residente en Palma.

Santa Catalina «diría que es la zona por excelencia para salir de marcha en Palma», indica Miguel Pérez. Alrededor de la calle Fábrica se disponen pequeños locales de copas y discotecas: «Los jóvenes de entre 18 y 30 años suelen optar por discotecas, mientras que el público de más de 35 acude mayoritariamente a locales pequeños, con menos ajetreo y donde se sienten más cómodos», subraya el mismo. En cuanto al ocio nocturno destacan en Palma dos polígonos: el de Son Castelló y el de Can Valero, con un público muy específico, que acude a locales concretos, como Es Gremi o el Dekapolis.

Mapa del ocio en Palma.
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Para salir a cenar

No será por restaurantes. Palma cuenta con núcleos gastronómicos diferenciados, para todos los bolsillos. Destaca, también en restauración, la zona de Santa Catalina, aglutinando tanto a extranjeros como a residentes, en busca, sobre todo, de cocina mediterránea. La Lonja se perfila asimismo como punto importante, pero solo para los servicios de cenas y con presencia mayoritaria de turistas. Siguiendo en la primera línea marítima, el Portitxol se alza como zona para disfrutar de buen pescado y marisco, combinando público turístico y residencial. Un caso curioso es el de Génova, apostando por la comida mediterránea, ha conseguido hacer confluir en esa zona, un tanto alejada del centro, a visitantes y mallorquines. Y, aunque la ruta martiana hace años que no se sitúe en tendencia, lo cierto es que se mantiene. «Una zona que se ha puesto muy de moda es la plaza Raimundo Clar. Tiene una selección de restaurantes muy diferentes, que funciona muy bien», detalla el presidente de CAEB Restauración, Alfonso Robledo.

El tardeo, una opción que triunfa

«Palma es una ciudad mediterránea y el Mediterráneo invita a hacer vida fuera: ir a tomarse unas copas, a comer unas tapas...», apunta el presidente de la asociación del ocio nocturno en Baleares. La tendencia de salir por las tardes a los locales de ocio, conocida como el 'tardeo', «ha venido para quedarse», señala, ya que la mayoría de los locales mantienen las sesiones de tarde de forma ocasional o con carácter permanente. El 'tardeo' triunfa los sábados por la tarde en la zona de Santa Catalina, donde acude gente de distinto perfil y, generalmente, de edades comprendidas entre los 30 y 50 y tantos años.

La idea fue extrapolada de la Península por Ángel Oliveros y Sandra Caules de Kaelum Club, donde los fieles, que cada año suman más, salen a comer por los restaurantes y bares de la zona, y posteriormente toman copas en los locales de los alrededores. La oferta por la zona es amplía, desde el veterano Kaelum hasta la Sala Luna o Sabotage, en la plaza del Vapor, u otros locales de las calles aledañas.