Som Pagesos promociona el 80 % de la producción hortofrutícola de Mallorca. La asociación de Agroilla, Agromallorca, es Merca y Terracor inicia una campaña para poner en valor el producto local y de calidad. | M. À. Cañellas - M.A. CAÑELLAS

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La asociación de productores agro-alimentarios Som Pagesos ha producido 17 millones de kilos de frutas y verduras en 2022, de los cuales el 26% corresponde a sandía, el 20% al tomate, el 18% al melón, el 11% al pepino, 11% al calabacín y el resto, a tubérculos y berenjenas. Así lo ha detallado este martes en una rueda de prensa el director general de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Fernando Fernández, junto al director gerente de Som Pagesos, Toni Monjo, y una de la socias, Isabel Vicenç. Som Pagesos, que comenzó en 2020 como una agrupación de los cuatro mayores productores horto-frutícolas, ha avanzado que abrirá en un futuro un centro logístico para mejorar la eficiencia que estará ubicado previsiblemente en MercaPalma.

Entre los impulsores se encuentra Terracor, Es Mercat, Agromallorca y Agroilla, que pretenden con esta unión defender el producto local de la fruta y la hortaliza; crear una marca de garantía propia que identifique el origen mallorquín; dignificar el trabajo de los «pagesos», y diversificar e impulsar la economía local. Fernández se ha felicitado de que esta asociación represente «innovación, calidad y orgullo pagés» porque concentra la capacidad y producción y la oferta, lo que resulta en una mejora de posición negociadora dentro del sector agrario. «Tienen un modelo de producción que cumple los estándares sociales y ambientales y afronta todos los retos sin complejos. Por eso, la Conselleria de Agricultura, Pesca y Alimentación se ha ilusionado porque la unión les permite ser más fuertes sin perder la identidad de las empresas que lo forman», ha señalado el director general.

Por su parte, Monjo ha remarcado que esta iniciativa ya supone un millar de hectáreas de superficies producida y un volumen de facturación que va desde los 17 hasta los 19 millones de euros, aproximadamente, en una asociación en la que trabajan más de 600 personas. «Lo que hemos hecho en 2022 es firmar acuerdos con grandes superficies y grandes cadenas hoteleras de Baleares. Nuestra tarea es estudiar qué nueva tecnologías podemos incorporar para ser más eficientes y recuperar los costes de producción, para que así sea rentable», ha indicado el director gerente de Som Pagesos.

Vicenç ha enumerado los cuatro retos a los que se enfrenta el sector agrícola balear: el relevo generacional, por lo que apuesta por impulsar la tecnología como forma de atraer a la población joven, el cambio climático por las temperaturas cálidas extremas y la ausencia de lluvias, la incertidumbre por la falta de suministros, y la falta de control del precio. «Teníamos claro que o nos juntábamos los pagesos o moríamos, hacemos un llamamiento al sector para que cuantos más se unan, mejor. El próximo paso sería impulsar un centro logístico para la gestión de los envases. Nos felicitamos de que este año hayamos podido mantener precios», ha finalizado una de las socias de la asociación.