Mallorca alcanza cada año el récord de presión humana en el mes de agosto con la llegada masiva de turistas. | M.À.C.

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Las fiestas navideñas provocan una salida masiva de residentes en Balears a sus lugares de origen, una circunstancia que tiene un efecto directo en la presión humana de las Islas. Si el mes de agosto es el que provoca una mayor densidad de población que está en Mallorca y en las otras islas al mismo tiempo, las Navidades provocan el efecto contrario y la presión humana queda bajo mínimos entre las fechas de Nochebuena y las fiestas de Sant Sebastià.

Es en este periodo del año, con el éxodo masivo de peninsulares a sus lugares de origen, cuando Mallorca tiene menos presión humana en un mismo día. La llegada de turistas para celebrar el fin de año en las Islas no compensa la salida masiva de ciudadanos que viven en Mallorca, pero son nacidos en otra comunidad autónoma o en otro país.

Los datos recogidos por el Institut Balear d’Estadística (Ibestat) en el Índice de Presión Humana durante los últimos diez años son claros. Durante esta década, el 23 de diciembre ha sido en cuatro ocasiones el día del año en el que menos gente permanecía en Mallorca. En función de los años y de cómo caigan las fiestas en el calendario, entre los días de menor presión humana también aparecen el 24 de diciembre, el 1 de enero y el 3 de enero.

Sant Sebastià

Sin embargo, en dos ocasiones en la última década se ha producido otra circunstancia curiosa a la hora de medir las cifras de población diarias: tanto en 2019 como en 2021 la fecha con menos gente ha rondado Sant Sebastià, lo que hace pensar que en Palma son muchos los que aprovechan la fiesta de su patrón para realizar un viaje de unos días.
En cualquier caso, este dato puede variar en el caso del año 2021 porque los datos del Ibestat se actualizan con un decalaje de dos meses por lo que aún no se tienen las cifras de diciembre de este año.

El análisis de esas cifras de mínimos históricos también permite comprobar que la presión humana ha ido creciendo cada año y ni siquiera la pandemia ha provocado una caída en las cifras. El día de menor presión humana de hace una década fue el 23 de diciembre de 2012, cuando había en Mallorca 843.950 personas. Diez años después, el 22 de enero de 2021, la población que había en la Isla ese día era de 946.169 ciudadanos, un aumento de más de 100.000 personas en solo diez años. Balears es una de las comunidades que aumentan población y ese aumento de 10.000 personas al año es muy elevado.

Ese récord de menos personas en un solo día se acerca mucho a la población real de Mallorca. Según los datos del Instituto Nacional de Estadística, el 1 de julio de 2021 vivían en Mallorca 947.309 personas, prácticamente la misma cifra del mínimo histórico: se compensa las salidas masivas navideñas con la llegada de turistas.

Récord hacia arriba

La pandemia no ha tenido efecto en los datos de menor presión humana, pero sí los ha tenido en lo opuesto: el día en que hay más personas en un solo día en Mallorca, que en la última década se ha situado siempre entre el 4 y el 10 de agosto. El récord absoluto sigue fijado en el 8 de agosto de 2017, día en el que había en Mallorca 1.473.873 personas al mismo tiempo. La cifra es apabullante: es como si la población de la Isla aumentara de golpe un 50 %, algo inasumible desde el punto de vista de la prestación de servicios.

La pandemia sí ha tenido consecuencias en esa monumental presión humana del mes de agosto. La llegada de turistas cayó en picado en 2020 y el récord de personas se alcanzó el 7 de agosto, con 1.142.972 ciudadanos en Mallorca. En 2021 la cifra ya ha vuelto a subir y el récord del año pasado fue el 10 de agosto, con 1.291.893 personas el mismo día.