Sanidad ha estipulado que antes de cualquier intervención el paciente se someta a una prueba diagnóstica de la COVID-19. En las operaciones de emergencia, si no se puede hacer un test rápido, se actúa como si el paciente fuera positivo. | Teresa Ayuga

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El hospital de referencia ha puesto el pie en el acelerador y ya ha recuperado entre un 62 y un 66 % de su actividad quirúrgica habitual, tras el periodo de estricto confinamiento. Durante este mes de mayo ha programado operaciones para una media de 30 pacientes diarios, mientras que en actividad ordinaria se intervienen unos 45.

Desde Son Espases explican que se ha dado prioridad a los pacientes con patologías más complejas o casos preferentes frente a la cirugía ambulatoria, que requeriría más presencia de pacientes en el hospital, ya que pueden hacerse más al día y ni siquiera requieren ingreso.

De momento sólo se ha recuperado una quinta parte de la actividad quirúrgica ambulatoria. Desde Son Espases explican que uno de los factores que afectan a la velocidad de recuperación de la actividad son las medidas de seguridad en el bloque quirúrgico. Los nuevos circuitos necesarios se aplicarán a las salas de espera de todos los casos ambulatorios ya sea en consultas, gabinetes y quirófanos de cirugía mayor y menor y estarán preparados a mediados del mes de junio.

Cabe recordar que durante la pandemia los recursos humanos y materiales se reubicaron en el centro sanitario para tratar de forma preferente a los pacientes de COVID-19 y también a los oncológicos y urgentes o no demorables, que nunca han dejado de realizarse. En el confinamiento se realizaron una docena de operaciones diarias que respondían a estas características.

Son Espases cuenta con 24 quirófanos, 20 se están destinando a las operaciones complejas y otros cuatro a cirugías ambulatorias. Además hay tres salas de operaciones en Verge de la Salut, que también están en activo.

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«Se priorizan porque requieren mucho tiempo. Hablamos de casos de cirugía torácica, pediátrica, de trauma infantil... Las que tienen más empaque», explican fuentes internas. Si la evolución de la pandemia lo permite se prevé que el nivel de intervenciones vuelva a incrementarse dentro de quince días.

Listas de espera

Las listas de espera para una intervención no han incrementado en número de pacientes pero sí el tiempo de demora. En los últimos datos publicados que comparan la situación de Son Espases de los meses de marzo de 2019 y de 2020 (mes en que se inició el estado de alarma) reflejan un incremento del 24,39 % de demora en Son Espases. Si hace un año se esperaba de media 74,15 días una operación, ahora son 92,24, es decir, más de tres meses.

Otro valor al alza a causa del inevitable parón asistencial es el de enfermos que esperan una intervención durante más de seis meses. Si en marzo de 2019 eran 203 personas, el mismo mes de este año ya había 377, un 85,71 % más.

La tarea para Son Espases, así como para el resto de hospitales de la red pública, no es fácil. Ahora toca recuperar todas las intervenciones que se quedaron sin hacer, para lo que es probable que no se reduzca la actividad en verano, como era habitual.

Cabe recordar que en caso de pandemia queda suspendido el decreto de garantía de demora pensado para que los pacientes que llevan más de seis meses en espera de una operación puedan reclamar ser prioritarios o una derivación a otro centro concertado o privado.