La delegación en la feria bienal Seatrade Europe de Hamburgo. | Ajuntament de Palma

TW
9

Principio de acuerdo para regular la llegada de cruceros al puerto de Palma entre administraciones públicas y navieras. Las partes mantuvieron este miércoles un primer contacto en la feria internacional de cruceros que se celebra en la ciudad alemana de Hamburgo y fijaron un calendario de reuniones para los próximos meses.

El conseller de Turisme i Treball, Iago Negueruela; el alcalde de Palma, José Hila; y el presidente de la Autoritat Portuària de Balears (APB), Joan Gual de Torrella, recibieron el sí de las navieras a negociar para limitar la llegada de cruceros al puerto de Palma y lograr una regulación efectiva y real de las llegadas de este tipo de embarcaciones. Se trata de una cuestión que en los últimos años ha copado la agenda social de la Isla e incluso la política, hasta el punto que los acuerdos de gobernabilidad de Bellver recogen esta cuestión.

Entre las reuniones que la delegación balear mantuvo con el sector de cruceros destacan encuentros con los principales directivos de la Asociación Internacional de Líneas de Crucero (CLIA por sus siglas en inglés), y con navieras especializadas en este segmento, como Royal Caribbean, Scenic Cruises, Sea Cloud o Hapag Lloyd. Desde la patronal CLIA manifestaron su agradecimiento a la disponibilidad de diálogo por parte de las instituciones de las Islas y consideraron el encuentro de este miércoles como «un buen punto de partida para garantizar la sostenibilidad del destino».

El conseller Negueruela, quien expresó su satisfacción por el inicio de las negociaciones, destacó la importancia de «buscar un marco que permita ordenar el turismo». «Debemos ver cómo limitamos la actividad en un destino que ha crecido de forma exponencial en todos los órdenes en los últimos años y por tanto toca hacer una ordenación, hacer que el visitante se sienta cómodo y siempre en términos de sostenibilidad», concluyó el conseller.

Por su parte, Hila recordó que la estrategia turística de la ciudad «está basada en la calidad y no en la cantidad», además de indicar que un destino masificado «no será bueno ni para las compañías ni para la ciudad». Por este motivo, defendió ante las navieras «no sobrepasar ciertos límites, porque a partir de esos límites al turista empieza a no gustarle el destino».

Por otra parte, la Autoritat Portuària de Balears aclaró este miércoles el anuncio del martes del presidente de Puertos del Estado, Salvador de la Encina, de que el sistema portuario de titularidad estatal invertiría 116 millones en el puerto de Palma hasta el año 2022 para acoger a cruceros. Según la APB, su propuesta de inversión, aún pendiente de aprobación, en el puerto de Palma es de 75,1 millones, de los que 25,3 serían para actuaciones en los muelles de Paraires-Poniente, que comparten pasajeros de cruceros y de líneas regulares.

Además, se prevén diversas actuaciones como la mejora y remodelación del Passeig Marítim de Palma y la mejora del entorno de la dársena del Molinar.