Según el Consell de Mallorca, las escorias utilizadas en la carretera Llucmajor-Campos «se consideran plenamente aptas para su uso» porque todas las pruebas practicadas muestran que «tienen todas las garantías exigibles para su uso en obra pública». | Maria Nadal

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El Consell de Mallorca ha asegurado este martes que las escorias utilizadas como sub-base en la obra del desdoblamiento de la carretera de Llucmajor a Campos son aptas para su uso y no son nocivas para la salud de las personas ni para la integridad medioambiental del territorio. Afirma que dichos materiales «han superado de manera positiva todos los análisis del Plan de Vigilancia Ambiental y también los practicados a las muestras a pie de obra».

Los análisis de los materiales que se han realizado, de acuerdo con la normativa vigente en Mallorca desde 2000 , muestran que la presencia de metales y tóxicos en las escorias utilizadas «se encuentran muy por debajo de los valores límites considerados nocivos para la salud de las personas y la integridad medioambiental del territorio», afirma el Consell en una nota.

Según el Consell de Mallorca, las escorias utilizadas «se consideran plenamente aptas para su uso» porque todas las pruebas practicadas muestran que «tienen todas las garantías exigibles para su uso en obra pública».

La institución recalca que, el uso de escorias «debidamente valorizadas» en las obras de la carretera Llucmajor-Campos «no supone ni ha supuesto ningún peligro para los trabajadores ni para el personal presente en la obra».

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El Consell explica que las escorias utilizadas en dichas obras han sido debidamente tratadas y convertidas en escorias valorizadas y que su uso como subbase de la superficie de rodadura de la carretera no supone peligro ni representa ningún riesgo para la salud de las personas ni para el medio ambiente.

Según el Consell, el uso de eco-áridos representa un hecho normalizado y una alternativa válida a depositar este material en vertedero, y su uso en la construcción de carreteras se da en países como Francia o Alemania, que «trabajan con los mismos materiales y métodos empleados en Mallorca». Defienden que el uso de escorias valorizadas permite no utilizar áridos provenientes de canteras o extracciones naturales que producen mayor impacto ambiental y paisajístico.

El Consell insiste en que todos los resultados de las analíticas de lixiviados realizadas en planta muestran que las escorias tratadas por Tirme cumplen con la normativa de referencia e indica que esos datos de la Comisión de Seguimiento de Residuos son públicos y pueden ser consultados.

La Plataforma Antiautopista exigió el martes pasado la retirada de las escorias usadas como «sub-base» en las obras de la carretera de Llucmajor a Campos, tras denunciar que los análisis de 6 muestras de este material realizados por Tirme entre 2016 y 2018 revelen que no se podría utilizar por contaminante.