Existe confusión sobre el tipo de pastillas adecuado para cada dolencia.

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El paracetamol y el ibuprofeno se encuentran entre los diez medicamentos más vendidos, ya que es común recurrir a ellos ante cualquier dolencia. Sin embargo, ¿cuándo están indicados cada uno de ellos?

La directora del Centro de Información del Medicamento, Francisca María Santandreu, explica que el paracetamol es un analgésico y antipirético recomendado para bajar la fiebre. Por su parte, el ibuprofeno es un antiinflamatorio.

Además, precisa que las dosis altas de estos medicamentos están indicadas para unos casos concretos y por un tiempo limitado. En concreto, el paracetamol de un gramo se debe tomar cuando hay un dolor moderado, bajo prescripción médica porque puede haber otras causas que lo ocasionen y requieran de otros medicamentos (ceática, principios de migraña, etc.).

El paracetamol de 500 ó 650 mg está indicado para un dolor puntual de cabeza, garganta o menstrual, es decir, dolores que no son crónicos.

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Santandreu advierte que su uso continuado es perjudicial para la salud. En el caso concreto del paracetamol, su uso continuado puede ocasionar problemas hepáticos (del hígado), así como otros efectos secundarios menos frecuentes como mareos, etc.

En relación al ibuprofeno, su uso continuado puede ocasionar riesgo cardíaco. La directora del Centro de Información del Medicamento puntualiza que la inflamación solo dura unos días, por lo que «no tiene sentido» prolongonar la toma de ibuprofeno. En este punto, señala que en el caso de una dolencia crónica su uso solo se recomienda cuando se produzca un brote.

Además, advierte que se debe ser «muy cauto» antes de tomar ibuprofeno, ya que puede provocar interacciones si se consumen otros medicamentos. Por ello, no está especialmente recomendado para personas mayores, ya que suelen tomar más de un fármaco.

Hasta ahora, el paracetamol y el ibuprofeno se podían adquirir en las farmacias sin receta médica, pero ahora ya se aplica la obligatoriedad de contar con una receta médica para poder adquirirlo, salvo algunas excepciones como el paracetamol de 650 mg. El Consejo Farmacéutico considera que esta medida es positiva desde el punto de vista de la salud pública.

Además, destaca el peligro que supone la automedicación. «El paracetamol y el ibuprofeno nos quedan en el botiquín de casa y nos los tomamos sin que haya una valoración médica» y reitera que puede ser perjudicial para la salud.