Catalina Cladera, Francina Armengol, Miguel Ensenyat y Cosme Bonet, durante la firma del acuerdo sobre el pago de la deuda del Govern al Consell. | Twitter

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El Govern abonará de inmediato 10 millones de euros al Consell de Mallorca, casi el 10 % de los 98,9 millones a que asciende la deuda autonómica con la institución insular, que este sábado ambas administraciones han pactado saldar en los próximos 15 años.

La jefa del ejecutivo autonómico, Francina Armengol, y el presidente del Consell de Mallorca, Miquel Ensenyat, han firmado el protocolo de intenciones que compromete el pago de la deuda contraída a cargo de los anticipos comprometidos antes de la aprobación de la Ley de Financiación de los Consells Insulars.

Armengol ha resaltado que el reconocimiento de esta deuda es un nuevo avance en una legislatura en la que más transferencias de competencias se han realizado al Consell de Mallorca y Ensenyat ha destacado que «es un buen acuerdo», porque «hacía diez años que los anticipos se paseaban de presupuesto en presupuesto».

La presidenta ha asegurado que de los anticipos pactados desde la legislatura 2007-2011 hasta la aprobación de la ley de financiación de los consells, que entró en vigor en 2014, solo se habían pagado 25 millones de euros en el ejercicio 2008.

A principios de este año, «se hizo un cálculo absolutamente técnico» por parte de la Conselleria de Hacienda que concluyó que la deuda pendiente ascendía a unos 98 millones de euros, ha precisado Armengol, que ha aclarado que aunque el acuerdo firmado establece un calendario a 15 años, «si la disponibilidad presupuestaria lo permite la voluntad política es adelantarlo».

El responsable de Hacienda del Consell, Cosme Bonet, ha admitido que los técnicos de su departamento consideraban que la deuda era casi 20 millones de euros mayor que la establecida por el Govern, aunque correspondía a los técnicos autonómicos fijar los criterios y realizar el cálculo, según el acuerdo entre ambas partes recogido en una disposición de la Ley de Presupuestos de 2018.

Pero Bonet ha puesto el acento en que el reconocimiento y abono de la deuda era «una prioridad política» que no podría demorarse «una legislatura más». «Hicimos un ejercicio de responsabilidad con una cantidad que es más que aceptable», ha enfatizado.

«Hemos llegado hasta donde podíamos llegar las dos instituciones», ha remarcado Miquel Ensenyat, que confía en que no se agote el plazo de 15 años fijado en el acuerdo suscrito hoy para saldar la deuda por los anticipos prometidos.

En consonancia con Armengol, el presidente insular también ha puesto de relieve los avances de la legislatura en el «refuerzo del papel de los consells», en particular del de Mallorca, que por ser la isla sede de las instituciones autonómicas tiene un papel menos preponderante que los de Ibiza, Menorca y Formentera.