Bel Oliver, en los juzgados esta mañana. | Jaume Morey

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La diputada socialista Bel Oliver se desmarcó ayer ante la juez que investiga hasta tres delitos en un contrato negociado sin publicidad por un importe de 60.000 euros otorgados por el Consell de Mallorca a un suplemento gastronómico, de la tramitación del expediente. «Todo se hizo bajo la más estricta legalidad», resumió.

El expediente fue aprobado por el Consell de Mallorca en la legislatura del Pacte de Progrès cuando Oliver desempeñaba el cargo de consellera insular de Turismo.

La empresa Oriel Comunicación se adjudicó el contrato, después de que otras dos renunciaran por falta de medios.

«El contrato por el procedimiento negociado se hizo con publicidad y con concurrencia. No es una subvención encubierta sino una adjudicación a cambio de unos servicios», explicó Bel Oliver a los medios de comunicación. Insistió ante la jueza en que a ella le pareció «una buena idea» impulsar una revista gastronómica para dar «visibilidad a productos agroalimentarios que no la tenían», y que, tras dar traslado del proyecto a Consell Executiú comprobó que «el expediente tenía todos los informes favorables del departamento de Intervención».

Detalles

Dijo que no recordaba si la exdirectora de Promoción Económica Luz Iglesias le dio detalles de la revista a la que le iban a conceder 60.000 euros, y ante la pregunta de por qué ese concurso de había aprobado tan rápidamente, respondió que no lo sabía.

Matizó, no obstante, que el mes de agosto de 2009 «estaba por el medio» y las partidas econmómicas que se podían dedicar al proyecto «eran para ese año y no para el siguiente».