El alcalde abrió el nuevo huerto urbano y le entregó las llaves al colegio público Gabriel Vallseca.

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«La única voluntad es evitar crispación, polémicas y enfrentamiento». Así justificó el alcalde Mateo Isern su decisión de anular la tradicional visita de la Corporación municipal en comitiva a los cementerios el día de Tots Sants. El alcalde argumentó que el pasado 1 de noviembre y a lo largo de este año se ha «constatado una falta de acuerdo entre los partidos políticos de cómo hacer este acto institucional». Més propuso incluir el Mur de la Memòria en el recorrido oficial y el gobierno municipal intentó hacer un nuevo texto consensuado, pero fue rechazado.

Sin acuerdo

Isern considera que «la institución debe estar al margen de las diferentes posiciones de los partidos políticos y de grupos de la sociedad si no hay un acuerdo unánime». En su oipinión, «lo inteligente, lo correcto y lo honorable es dejar de hacer esta visita».

«No quiero ser objeto o motivo de enfrentamiento entre los ciudadanos», aseguró el alcalde. Además, instó a que «un acto como este se pueda circunscribir al ámbito personal y de cada partido político».