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El grupo municipal MÉS en el Ayuntamiento de Palma ha alertado hoy de que el consistorio podría tener que devolver 1.350.000 euros a las instituciones europeas por incumplir el programa «Urban» de rehabilitación de las viviendas sociales del barrio de Camp Redó, conocido como Corea.

El portavoz de MÉS, Antoni Verger, ha acusado al gobierno municipal del PP de «temeridad y sectarismo» por haber decidido no continuar el proyecto de rehabilitación «simplemente porque era heredado de la legislatura anterior», y ha responsabilizado al alcalde, Mateo Isern, de la degradación actual de la zona, ha informado la coalición en un comunicado.

MÉS ha asegurado hoy que los informes internos de los técnicos del Ayuntamiento de Palma reconocen sobre el proyecto de rehabilitación que forma parte del programa europeo «Urban» que no se ha gastado ni siquiera la mitad del presupuesto total previsto.

«Es una gran temeridad por parte del PP de Cort no continuar con la rehabilitación de las viviendas del Camp Redó porque el dinero de Europa ya ingresado ahora se deberá devolver», ha dicho Verger, que ha indicado que los informes técnicos admiten que existe «el riesgo» de tener de reintegrar 1.350.000 euros de estos fondos europeos FEDER.

MÉS ha recordado que el proyecto de rehabilitación de viviendas del barrio del Camp Redó contó con apoyo de los fondos europeos de hasta 2.929.000 euros que fueron concedidos al consorcio urbanístico Riba, y de los que no se ha gastado ni el 50 %.

El grupo de la oposición considera que la decisión de paralizar el proyecto de rehabilitación de Corea, que contaba con el visto bueno y la confianza de los organismos europeos, fue sectaria por parte del PP.

MÉS ha denunciado que el proyecto del PP en Camp Redó «no es la rehabilitación sino una operación urbanística especulativa consistente en el derrumbe del barrio y la construcción de nuevos edificios».

Según la coalición nacionalista, el informe de evaluación del proyecto de rehabilitación del Camp Redó pone en evidencia que los 5.840.000 euros previstos para el proyecto, tan sólo se ha ejecutado obra por el 47 %, unos 2.700.000 euros y el resto ni se ha licitado.

Buena parte de este presupuesto no gastado suponía la creación de equipamientos y la mejora del medio ambiente urbano del barrio, ha indicado MÉS.

«Este hecho supone un incumplimiento clamoroso del programa URBAN por parte del Ayuntamiento de Palma y nos pone en un riesgo real de tener que devolver 1.351.450 de fondos FEDER ya ingresados, tal como se reconoce en los informes técnicos del propio Ayuntamiento de Palma», ha dicho Verger.

El portavoz de MÉS ha acusado al alcalde de Palma y al concejal de Urbanismo, Jesús Valls, de «dejar pudrir la zona del Camp Redó y condenar a sus vecinos a perder toda esperanza de hacer salir su barrio de un proceso de degradación que cada día se acelera más».

Verger ha asegurado que el PP «demuestra una vez más que no cree en el proyectos de rehabilitación de la ciudad, como por ejemplo el Puig de Sant Pere o el Camp Redó, sino que tan sólo le interesa manejar para promover operaciones urbanísticas especulativas como demostraron con el barrio de sa Gerreria».

MÉS presentará una propuesta en el pleno de julio para que siga el proyecto de rehabilitación de Camp Redó y se habilite un centro de días y viviendas tuteladas para la tercera edad.