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El juez del caso Palma Arena, José Castro, ha advertido hoy de que le será «físicamente imposible» garantizar que no se produzcan «indeseables filtraciones» de las grabaciones de las declaraciones del duque de Palma, Iñaki Urdángarin, y el resto de imputados citados este mes en Palma.

En el escrito notificado hoy accediendo a que se graben en vídeo dichas declaraciones, al que ha tenido acceso Efe, el juez admite que no podrá controlar que los medios de comunicación tengan acceso a ellas «habida cuenta del elevado número de profesionales que física y legalmente tendrán acceso a los soportes de grabación».

El titular del juzgado de instrucción 3 de Palma ha autorizado hoy que se graben las declaraciones de los ocho imputados en el caso Nóos que prestarán declaración los próximos 11, 18 y 25 de febrero, a petición de varias de las partes, entre ellas el exsocio de Urdangarin, Diego Torres, que comparecerá el próximo sábado.

También han reclamado que se usara este formato la representación de Ana María Tejeiro, esposa de Torres; el Instituto Nóos; Nóos Consultoría; Fundación Deporte, Cultura e Integración Social; y las empresas Shiriamasu e Intuit Strategy.

Para que todo funcione correctamente y se obtenga «la mejor calidad de imagen y sonido», el juez también requiere a la gerencia territorial del Ministerio de Justicia que revise el sistema de grabación existente en los juzgados de la capital balear, así como que se cuente en todo momento con un técnico disponible.

En el mismo escrito, el juez libra oficio a la Fundación Illesport para que le remita toda la información que tenga sobre la presentación oficial del equipo ciclista Illes Balears en el año 2005.

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En concreto, pide información sobre un acuerdo que adoptó el 10 de enero de 2005 la ejecutiva de la Fundación, dependiente del Govern balear, por el que se aprobaba por unanimidad llevar a cabo todos los trámites necesarios para la presentación oficial del equipo para la temporada por un importe máximo de 50.000 euros.

Entre otras cosas, la Fiscalía Anticorrupción investiga dentro de esta pieza del caso Palma Arena el patrocinio por parte del Govern de Jaume Matas del equipo heredero del antiguo Banesto.

Según declaró ante el juez el ex director general de Deportes de Baleares, José Luis «Pepote» Ballester, Iñaki Urdangarin ofreció a Matas durante una reunión celebrada en septiembre de 2003 en el Palacio de Marivent que el Ejecutivo autonómico patrocinara el equipo.

La labor de Urdangarin consistía en crear una «oficina del proyecto», que tenía un presupuesto de 300.000 euros y se llevaría a cabo a través de la empresa Nóos Consultoría Estratégica.

En noviembre de 2003, el presidente autonómico dio el visto bueno al patrocinio y la contratación de Urdangarin para la oficina del proyecto y, según Ballester, nadie se planteó convocar concurso alguno para adjudicar dicho servicio porque Matas había ordenado la contratación del duque de Palma.

Urdangarin propuso posteriormente a Matas, a finales de 2004 o principios de 2005, organizar un foro de ideas para mejorar los destinos turísticos con el binomio turismo-deporte, que organizó el Instituto Nóos durante dos años consecutivos con un gasto para las arcas públicas de Baleares de 2,3 millones de euros.

Finalmente, el juez ordena en la providencia abrir el quinto tomo de esta pieza, dado el volumen que ha alcanzado esta instrucción.