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El portavoz adjunto del grupo parlamentario socialista, Vicenç Thomàs, ha asegurado hoy que los presupuestos presentados por el Govern del PP para 2012 suponen el desmantelamiento de la aplicación de la Ley de Dependencia en las islas, ha informado el PSIB en un comunicado.

Thomàs ha presentado hoy las enmiendas socialistas a los presupuestos en materia de bienestar social y han criticado que dichas cuentas suponen «el primer paso para desmontar la Ley de Dependencia» y siguen el camino marcado por el presidente electo, Mariano Rajoy, que cuestionó públicamente su viabilidad.

La diputada socialista Contxa Obrador ha subrayado que la consellera de Salud, Familia y Bienestar Social, Carmen Castro, «reconoció que el presupuesto para bienestar social es insuficiente».

Según Obrador, las partidas para aplicar la Ley de Dependencia en 2012 «no están dotadas suficientemente» y sólo permiten pagar los primeros cuatro meses de nóminas y los primeros seis meses de residencias y plazas concertadas.

La diputada socialista ha asegurado que si la consellera Castro creyera en el mantenimiento del Estado de Bienestar «se preocuparía de buscar los recursos que faltan para garantizar los derechos sociales».

Obrador ha propuesto a Castro que pague lo que se debe a las entidades del tercer sector «con los 6,3 millones de euros de la partida de estudios y trabajos técnicos externos que contemplan los presupuestos de la comunidad».

El grupo socialista ha planteado varias enmiendas que restarían partidas de otros conceptos e incrementarían en 12 millones las de bienestar social.

Esos 12 millones irían a la aplicación de la Ley de Dependencia, al Consorcio de Discapacitados, el pago de la Renta Mínima de Inserción, la atención a menores y al Instituto Balear de la Mujer.

Obrador ha reclamado que se destinen 40.000 euros a las familias y entidades sin ánimo de lucro que trabajan por las mujeres ya que «actualmente los presupuestos no contemplan ningún euro para políticas de protección de la mujer».

Por otra parte, Thomàs ha denunciado que el Govern renuncie a los 23 millones de euros que se recaudarían con el Impuesto de Patrimonio que ha decidido no aplicar y que podrían servir para garantizar el Estado de Bienestar que se ha convertido en el «punto de mira de los recortes del PP».

Según el portavoz adjunto socialista «el PP es duro con los débiles y débil con los fuertes».

Thomàs ha lamentado que, desde la llegada del PP al gobierno haya aumentado el paro y bajado la calificación de la deuda de la comunidad.

«No son capaces de generar confianza ni introducir medidas para reactivar el empleo», ha criticado Thomàs, que considera que estos dos obstáculos se añaden a unos presupuestos «irreales e insuficientes en los que faltarían entre 250 y 300 millones de euros», para formar «un triángulo que va en perjuicio del Estado de Bienestar».