Así lo ha anunciado hoy en rueda de prensa la consellera de Turismo, Joana Barceló, tras dar cuenta a la Mesa de Turismo de la reordenación de su departamento, que supondrá asimismo el nombramiento del hasta ahora director del Inestur, Antoni Munar, como director general de Desarrollo Turístico, nuevo nombre de la antigua Dirección General de Ordenación, que estaba vacante.
La que ha sido durante toda la legislatura directora del Ibatur, Susanna Sciacovelli, pasará a ocupar la dirección del Instituto de Turismo, aunque solo por unas semanas, ya que abandonará el puesto por motivos familiares a mediados de junio y será reemplazada por Mar Guerrero, mallorquina licenciada en Económicas y especializada en marketing que hasta ahora desempeñaba labores de responsabilidad en el Instituto de Formación y Ocupación de Calvia.
Sede en las oficinas del Inestur
Barceló ha explicado que la nueva empresa pública, que tendrá su sede en las dependencias del Parc Bit que ahora ocupa Inestur, «asume todo el personal» de los organismos a los que reemplaza y también todas sus competencias, a excepción de las referentes a calidad e infraestructuras, que pasarán a la Dirección General de Desarrollo Turístico.
La consellera ha indicado que la supresión de algunos arrendamientos y asesorías jurídicas derivadas de la fundición de empresas públicas permitirá ahorrar unos 300.000 euros al año, cantidad similar a la ya recortada con la supresión de cinco altos cargos, que serán seis a partir de la desaparición del Inestur.
Además, ha adelantado que la Agencia de Turismo, que posiblemente será creada por acuerdo del Consell de Govern el próximo viernes, integrará en su consejo de dirección a representantes de los consells insulars.
Barceló ha elogiado el trabajo que ha desarrollado Sciacovelli al frente del Ibatur, a lo que ésta ha respondido agradeciendo su confianza y el respaldo del sector y de los trabajadores de la Conselleria.
Nuevo sistema para la categoría de los hoteles
Por otro lado, la consellera ha indicado que en la Mesa de Turismo, en la que participan administraciones, patronales y sindicatos, se ha decidido proponer un nuevo sistema para la obtención y mejora de la categoría de los hoteles que permitirá tres vías de certificación.
Los alojamientos turísticos podrán obtener de una a cinco estrellas con los criterios tradicionales, es decir, aquellos basados en parámetros de edificación como la superficie de las habitaciones, los espacios de servicios, las instalaciones complementarias etcétera.
Pero se introducirá también otro modelo de certificación de categoría basado en los servicios que presta cada establecimiento y en determinados parámetros de calidad, sistema tomado del que rige en buena parte del norte de Europa.
La tercera vía será una mezcla de las dos primeras, ha detallado Barceló, que ha hecho hincapié en que los sistemas de determinación de las categorías serán «homologables a nivel europeo».
Además, la Mesa de Turismo también ha dado hoy su visto a un convenio con la Secretaría de Estado de Turismo para profundizar en la implantación del sistema de calidad en destino SICTED y del distintivo de calidad Q, así como a un acuerdo con el Instituto de Estudios Turísticos para mejorar la encuesta sobre el gasto de los turistas.
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