Las nuevas luces navideñas instaladas este año por el Ajuntament de Palma iluminaron ayer el paseo de numerosos ciudadanos que quisieron aprovechar que, a pesar de ser domingo, algunos comercios abrieron sus puertas.
Tras la calma de la mañana "que seguramente muchos aprovecharon para descansar y recuperar fuerzas", la tarde estuvo mucho más animada.
Aunque las calles no estuvieron abarrotadas, ni mucho menos, sí se vieron más concurridas que en un domingo cualquiera. Con dos días de fiesta por delante, el paseo se convierte en una parte del ocio ciudadano.
No hay que olvidar que ayer fue el primer día festivo en el que los comercios pudieron abrir con vistas a la celebración de Nadal y la llegada de los Reyes Magos. La 'fecha límite' para comprar los regalos se acerca y ayer muchos aprovecharon el tiempo. Otros, de momento, sólo disfrutaron del paseo iluminado.
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