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«A nosotros nos toca estar en la oposición», aseguró ayer el portavoz del grupo del Partido Popular en el Consell de Mallorca, Jaume Font, tras darse a conocer la salida de Unió Mallorquina del gobierno de la institución que preside la socialista Francia Armengol.

Tras recordar que «Armengol hoy tiene menos consellers que el PP y, por tanto, hoy no sería presidenta», Font rehuyó pronunciarse sobre una eventual alianza con UM para desbancar a la izquierda (PSOE y Bloc) del poder en el Consell. En este sentido comentó que «vamos a ver lo que pasa en los próximos días», añadiendo a continuación que «si dentro de dos meses la situación en el Consell es ingobernable ya se hablará».

No obstante, Jaume Font abogó por la «estabilidad institucional» y retó a la presidenta Armengol a que «adopte un talante de diálogo» para reconducir el clima político en el Consell. No obstante, el portavoz del principal grupo de la oposición admitió que «establecerá los contactos necesarios con UM para sacar adelante nuestras propuestas» ya que, según él, la prioridad en estos momentos es la crisis económica y la necesidad de aplicar políticas sociales para los sectores más desfavorecidos de la sociedad.

En todo momento Font se mostró cauteloso respecto a las repercusiones de la crisis institucional y su efecto en el Ajuntament de Palma y el Govern, «es UM la que tiene que decidir qué hacer, fueron ellos los que impidieron que tras las elecciones gobernase el partido más votado», insistiendo que «yo no quiero perder de vista la crisis, no entro en el juego de la pugna por quién ocupa la presidencia del Consell. No soy raro, soy realista. Lo que tenga que ser será, incluso que se pongan de acuerdo otra vez».

«Entiendo el enfado de UM y ha sido autocrítico, es una actitud que se agradece», dijo Font, el cual apostilló que «si yo hubiera sido el presidente del Govern, UM no hubiera roto el pacto. Yo hubiera cumplido mis compromisos».