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Bancos y cajas de ahorros firmaron 12.251 créditos hipotecarios en Balears en el primer semestre del año, lo que supuso una caída del 25 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior, por un importe de 1.783 millones de euros, un 44'76 por ciento menos que el año pasado, según refleja la Estadística de Hipotecas difundida ayer por el Instituto Nacional de Estadística.

La caída en el número de operaciones hipotecarias y en el capital prestado se derivan de la crisis financiera y económica y del consiguiente endurecimiento en la concesión de créditos por parte de las entidades financieras. En el descenso del capital prestado también ha influido el reajuste de los precios inmobiliarios, según han afirmado las distintas entidades de previsión económica.

En cuanto a los créditos medios, la estadística del INE indica que se situaron en 145.583 euros en el acumulado de los meses de enero a agosto, lo que supone un descenso del 26 por ciento.

Respecto a la evolución histórica, los datos del INE indican que la crisis ha situado la actividad hipotecaria en Balears en los niveles del año 2003, muy por debajo de los máximos registrados en el punto álgido del 'boom inmobiliario' entre los años 2005 y 2008.

El número de hipotecas constituidas sobre viviendas ascendió a 1.688 el pasado mes de junio en el archipiélago, lo que supone una caída del 0'4 por ciento respecto a hace un año, y un repunte del 6'3 por ciento sobre el mes de mayo, según la información difundida por el Instituto Nacional de Estadística.

Asimismo, el capital suscrito para la concesión de estas hipotecas se redujo un 32'3 por ciento, al pasar de 275.609 millones de euros en junio de 2008 a los 192.997 millones de euros en 2009.

Desde el departamento de Economía de la Confederació d´Associacions Empresarials de Balears, CAEB, su responsable, Vicenç Tur, afirmó que los principales indicadores económicos, exceptuando los de empleo, experimentarán desde finales verano una estabilización en sus tasas interanuales, debido a que hace justo un año comenzó la fase más virulenta de la recesión económica en España y Balears.

Respecto al comparativo con el resto de España, en el mes de junio se redujo la contratación de hipotecas en trece comunidades, especialmente en Castilla-La Mancha y Asturias, que registraron las evoluciones más negativas, con caídas del 28'6 y 21'6 por ciento, mientras que aumentaron levemente en Cantabria, Catalunya y Galicia.