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RUIZ COLLADO (HAMBURGO) La delicada situación por la que atraviesa la economía alemana, que finalizará 2009 con un decrecimiento del PIB en torno al menos seis por ciento, ha hecho que los grupos turísticos estén tomando todo tipo de precauciones para reducir riesgos de cara a la contratación de la temporada 2010. El presidente de TUI-Alemania, Volker Böttcher, en este sentido, anuncia la mayor bajada de precios hoteleros de toda la historia en Balears y resto de destinos competidores, principalmente Turquía, con el fin de animar las ventas el próximo año.

Böttcher, tras la presentación del programa de invierno 2009-2010 de la TUI, señaló: “Es imposible subir los precios con un mercado tan débil, a causa de la crisis económica, de ahí que la contratación del verano 2010, que ya se ha iniciado en Balears, se está cerrando con fuertes bajadas de precios respecto a este verano 2009, porque es la única manera de contrarrestar esta coyuntura tan complicada, la cual no he visto antes otra similar, principalmente porque se trata de una crisis económica única que antes no se había vivido".

Comprensión
Añadió que los hoteleros de Balears “están entendiendo la situación y no queda más remedio que bajar precios, por muy elevados que sean, porque no hay que perder competitividad respecto a otros destinos. Se avecinan tiempos duros para todos, pero no hay que perder los nervios y mantener la calma".

Mallorca, pese a todo, seguirá siendo el destino número 1 también en 2010 para el mercado alemán. “La gran conectividad aérea con Alemania y el Reino Unido, así como la calidad de la oferta hotelera y los servicios e infraestructuras, son la mejor garantía de Mallorca en el actual contexto, por lo que nunca habrá problemas para traer clientes a la Isla. Menorca y Eivissa no están en la misma situación, por lo que verán reducidas sus capacidades de plazas aéreas y cupos de camas", apuntó Böttcher.

En cuanto a su valoración sobre la actual temporada turística y cómo puede evolucionar en los próximos meses en Balears, Böttcher no fue muy optimista: “No se repetirán las cifras de negocio ni de visitantes de 2008, porque es imposible. Luchamos semana a semana, porque no podemos hacer previsiones a un mes vista, circunstancia a la cual nos tenemos que ir acostumbrando touroperadores y hoteleros. Mallorca sigue como número uno y el final de temporada dependerá de cómo reaccione el mercado, puesto que hay en estos momentos 14 millones de clientes alemanes que todavía no han elegido a dónde quieren ir de vacaciones».