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LAURA MOYÀ El PP volvió a ser ayer la fuerza más votada en Palma, pero perdió casi 5.000 votos en comparación con las elecciones europeas de 2004. De esta manera, la candidatura liderada en Balears por Rosa Estaràs se quedó con 40.070 votos, lejos de los 44.679 de hace cinco años. El PSOE, por su parte, tampoco alcanzó las cifras de los anteriores comicios, aunque mantuvo el mismo porcentaje: el 38%.

El dato más significativo fue el fulgurante ascenso de Unión Progreso y Democracia (UPyD), que se convirtió en la tercera fuerza más votada de Ciutat con 3.854 sufragios, es decir, el 4'13 por ciento del total. El PSOE obtuvo ayer 36.652 votos, cifra que en 2004 ascendió hasta los 39.983. Los casi 3.000 votos menos de los socialistas son los mismos que también perdieron a nivel autonómico.

Como en 2004, la abstención volvió a marcar la jornada electoral. En esta ocasión, 93.414 palmesanos acudieron a las urnas y otros 172.475 decidieron no votar. Así, la abstención subió en relación a hace cinco años, pasando del 63'61 por ciento de 2004 al 64'87 por ciento de 2009.

La cuarta fuerza más votada de Palma fue Esquerra Unida-Verds, que obtuvieron los 2.774 sufragios. Unió Mallorquina, que formaba parte de la Coalició per Europa, se mantuvo en la misma línea que en 2004 con 2.263 votos. Hace cinco años, consiguió 2.385. La quinta lista más votada fue la de Europa de los Pueblos, integrada por ERC y Entesa per Mallorca. Logró 2.027 sufragios y en 2004, 2.316. Els Verds alcanzaron los 968 votos.

En Palma, todos los partidos sufrieron, en mayor o menor medida, la pérdida de sufragios. UPyD, en su primera participación europea, fue la única formación que destacó en una jornada protagonizada, una vez más, por la gran abstención.