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La ejecutiva de Unió Mallorquina se reúne esta tarde, de manera imprevista, para intentar zanjar la guerra interna que afecta a la formación nacionalista desde hace meses. El resultado de la reunión es un interrogante, aunque algunos dirigentes esperan que en el encuentro de esta tarde salga una solución definitiva.

En los últimos días se ha tensionado al máximo la situación en UM. El secretario general de UM, Miquel Ferrer, y el vicepresidente primero, Miquel Àngel Grimalt, han encabezado una corriente contraria a Nadal. Distintas fuentes aseguran que Ferrer y Grimalt estarían dispuestos a forzar la dimisión de Miquel Nadal como presidente de UM por el error de la candidatura europea y, además, por la declaración judicial del conseller de Turisme en el «caso Can Domenge».

Grimalt y Ferrer
Tanto Ferrer como Grimalt han estado pulsando durante estos días los apoyos que tienen en las distintas juntas locales. Algunas fuentes sostienen que el «número dos» y «número tres» de UM podrían estar dispuestos a provocar la dimisión de Miquel Nadal.

Nadie se atreve a pronosticar qué ocurrirá en la ejecutiva convocada para esta tarde. Podría producirse una votación secreta para decidir si Nadal tiene que dejar el cargo. En función de cómo se desarrolle la ejecutiva, podría convocarse un Consell Polític para que Nadal conociese cuántos apoyos tiene en la formación nacionalista.

Desde el entorno de Nadal aseguran que el president tiene, en estos momentos, la mayoría de los 15 votos de la ejecutiva, aunque otras fuentes aseguran que no tiene los apoyos suficientes para seguir al frente de UM. En la reunión de esta tarde no asistirá Cati Julve, que no llegará a Mallorca hasta el domingo. Aunque Nadal da la impresión de estar desmoralizado por la situación interna de UM, fuentes de su entorno garantizan que en ningún momento se ha planteado dimitir. «Si Nadal quiere, seguirá», dijo una persona de la ejecutiva próxima al presidente de UM.

El gran interrogante es saber si Grimalt, finalmente, estaría dispuesto a asumir la presidencia de UM. Si Nadal dimitiese, Grimalt sería su sustituto, según los estatutos. Precisamente, Grimalt mantuvo ayer una comida con el otro vicepresidente de UM, Guillem Ginard, quien no oculta su apoyo a Nadal. Posteriormente, Ginard acudió a un encuentro con Nadal, Pascual, Flaquer y Nicolau a escasos metros del lugar donde tuvo la cita con Grimalt. Alli recibieron la notificación de Ferrer de que la ejecutiva se convocaba para hoy.

Como adelantó este diario, el propósito de Nadal es incorporar a Nicolau en el Govern y que colabore en el partido. Nicolau es una persona de la máxima confianza de Munar. Damià Nicolau aún no ha dado una respuesta definitiva, pero el acercamiento es cada vez más evidente. Nicolau ocuparía el puesto en la Conselleria de Turisme que dejaría vacante Antoni Oliver, actual gerente de Inestur. El objetivo de la dirección de UM es nombrar a Oliver como coordinador de la formación nacionalista, pero los cambios no se producirán hasta agosto.