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El Partido Popular ha iniciado acciones legales contra la alcaldesa de Palma, Aina Calvo, la presidenta de la Funeraria, Begoña Sánchez, y la policía por la detención ilegal y denuncia falsa de un militante del PP que trabajaba en la empresa municipal, según ciutat.es. La querella contra Calvo y la edil Begoña Sánchez se presentó hace unas semanas. El PP también acusa a la policía de haberse extralimitado en la detención del militante de Nuevas Generaciones, según informaron ayer desde las filas populares.

Alejandro Jurado, militante de Nuevas Generaciones, fue detenido el 4 de julio como consecuencia de una denuncia de la Funeraria Municipal. En concreto, la denuncia acusaba a Jurado de extraer información de los ordenadores de la empresa municipal poco antes de ser despedido. Pese a que la denuncia se presentó el 10 de julio, la detención de Jurado se produjo el 4 de julio, es decir, 25 días después. Casualmente, el congreso regional del PP se celebraba al día siguiente. Hace dos meses, la juez encargada del caso decidió archivar la causa. La Fiscalía tampoco vio ningún tipo de delito por parte del militante de Nuevas Generaciones.

Jurado fue detenido en su propio domicilio el 4 de julio cuando se encontraba desayunando con sus padres. Poco después, Jurado ingresó en los calabozos de la Policía Nacional, donde permaneció durante cinco horas. En ese tiempo, la policía acudió al domicilio de Jurado para chequear el ordenador del joven militante del PP. No encontró ninguna prueba en su contra y Jurado fue puesto en libertad. La denuncia fue archivada en noviembre. Las explicaciones que ofreció Sánchez en el pleno de Cort no convencieron al PP, que ha decidido poner una querella contra la alcaldesa de Palma y su edil. La alcaldesa de Palma tampoco ha dado ningún tipo de explicaciones ante la detención ilegal y despido irregular de un ex trabajador de la Funeraria Municipal. Calvo tampoco ha exigido responsabilidades políticas a la responsable de la Funeraria.

Los populares también entienden que la Policía Nacional se extralimitó en la detención de Jurado ya que, sin haber cometido ningún delito, el dirigente de Nuevas Generaciones fue enviado al calabozo durante toda una mañana. Posteriormente, la policía registró el domicilio de Jurado en busca de unas pruebas que no encontró.