La alcaldesa de Palma, la socialista Aina Calvo, dio a conocer ayer que responsables de Urbanisme se reunirán en breve con los vecinos de El Terreno que en estos últimos meses han expresado su oposición a la construcción de un aparcamiento subterráneo de 90 plazas entre las calles Dos de Maig y Josep Villalonga. Dichos vecinos también han venido denunciando la presencia de vehículos de hasta 26 toneladas en la zona. Para protestar por ambas circunstancias, varias decenas de residentes impidieron el pasado martes, durante dos horas, el paso de camiones en la calle Josep Villalonga.
La alcaldesa confirmó ayer que la empresa promotora de las obras, Yongyi, posee las preceptivas licencias, así como una autorización especial que permite que puedan circular por la zona vehículos de gran tonelaje.
Calvo añadió que, aun así, en estos momentos hay tres expedientes abiertos, dos por suciedad y otro por ruidos, que podrían derivar, respectivamente, en la imposición de dos sanciones de hasta 300 euros y en la obligación de adoptar medidas correctoras del ruido. Además, la Policia Local tiene previsto llevar a cabo una sonometría en la zona en los próximos días.
«Quiero transmitir un mensaje de tranquilidad a los vecinos», señaló, y recordó que un celador municipal acude cada semana a la zona para vigilar las obras.
Cabe recordar que desde el pasado mes de diciembre, el denominado Grupo El Terreno ha venido denunciando dichas obras, que empezaron hace ya un año y medio. Dicha asociación solicitó esta semana a la alcaldesa que paralizase de forma cautelar las obras del aparcamiento subterráneo y también que revise el proyecto aprobado en el pasado mandato, que presidió la popular Catalina Cirer.
Las quejas de los vecinos también hacen referencia a la aparición de grietas en varios edificios, al hundimiento de parte del pavimento y a diversos desperfectos en la zona.
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