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Simó Andreu pasará gran parte del verano rodando entre Chequia, la antigua Yugoslavia, y en los estudios Barandof de Praga. Ayer a mediodía, volaba a París para seguir rumbo hasta Slovenia, donde pasado mañana, en Kovaric, pueblo de triste recuerdo ya que en la Segunda Guerra Mundial mataron a muchas personas, debe de rodar algunas secuencias de Las crónicas De Narnia: el príncipe Caspian, «película en la que intervengo en un papel no muy largo, cosa que no me importa, pues a veces es mejor tener un papel corto en una gran película que uno largo en otra mediocre. En ésta formo parte del equipo de los humanos, que en principio son malos, sobre todo destructores. Y en esta ocasión me toca trabajar en inglés, lo que para mí no es problema».

A Simó Andreu las cosas no le van nada mal. Ni en lo artístico, porque trabajo no le falta, ni en lo personal, porque cuando no trabaja, vive felizmente con su mujer en la casa que tiene en Santa Maria, con la Serra de Tramuntana siempre a la vista.

-¿Qué proyectos tienes?
-Los tengo, claro, pero hasta que no se firmen no hablo de ellos. Ya sabes, los actores no hablamos de proyectos porque dicen que si lo haces, éstos nunca se hacen realidad.

-Bien, pues, entonces, pasemos a otro tema. La cultura, sobre todo en la parte que a ti te toca. El cambio político que ha tenido lugar en las islas, ¿de qué modo puede influir en los actores?

-Más que en nosotros, los actores, puede que influya en las productoras y en los empresarios. Nosotros siempre seguiremos, con estos o con otros. Por eso, lo que les pido a los políticos es que se asesoren bien, y que los planes culturales los hagan a largo plazo, y no que los cambien cada cuatro años. Y sobre todo, que se saque provecho a los recursos...

-¿Qué recursos?
-Por ejemplo, los teatros. Los municipales y del Consell, Municipal, Xesc Forteza, Principal, sin olvidar los privados. Para ello es necesario que la gente que acaba de llegar sepa gestionar, moverlos...

-Sin dejar de dar cancha al teatro de aquí, ¿crees que es importante no olvidar el teatro en castellano?

-Por supuesto. Y óperas italianas, y Mozart, y teatro de Shakeaspeare. Lo importante es que se llenen los teatros de las dos maneras, por la parte del público y por el escenario. A lo que no hay derecho es que venga una compañía con tres actores para vivir de la subvención haciendo su vodevil. Eso no interesa nadie, a parte de que los teatros públicos no están para eso, sino para montar espectáculo, y para que la gente que tiene inquietudes artísticas encuentre su sitio.

-¿Qué opinas de que los Premios Ciudad de Palma de novela no admitan textos en castellano?

-Me parece muy bien. Si estos premios son para promocionar la novela en catalán, pues que acepte sólo textos catalanes. Y si quieren promocionar el castellano, que creen otros Premios Ciudad de Palma para novela en castellano. Esto -añade- lo podemos extrapolar al teatro. Por ejemplo: si crea un ciclo de teatro en catalán, lo absurdo sería intercalar teatro en castellano. O viceversa. Pero como en Balears hay teatros, lo suyo es que, de acuerdo a una buena planificación, se haga teatro en catalán, en castellano, y si me apuras hasta en inglés o alemán, dado que aquí hay público inglés y alemán.

-Por último, ¿te ha sorprendido que sa Pobla haya dejado de ser del PP? ¿Raro, no?

-Es raro, sí, pues sa Pobla es de derechas, es un pueblo de pequeños propietarios. Porque fíjate que curioso ha sido, ya que los que han quitado el poder al PP son gentes de derechas, escindidas de UM.

Pedro Prieto
Fotos: Click