La XXIII Mostra de Cuina Mallorquina cerró ayer sus puertas con una jornada en la que exquisitas recetas realizadas por cocineros de reconocido prestigio hicieron las delicias de los últimos asistentes.
Como cada día desde que se inauguró el pasado 11 de abril, se llevaron a cabo demostraciones de cocina en vivo por parte de cocineros; en esta ocasión de Emilio Castrejón, del restaurante Bar-Co, y Pedro Riera, de Es Molí d'en Pau.
Además, ayer participaron los restaurantes Ca'n Mateu de Algaida con Granada d'albergínies, el Gran Casino de Mallorca con Llom de porc amb verdures i bolets, Ses Cases Noves de Marratxí con Bacallà perfumat amb salsa de mel, gírgoles i gambes, Els Caçadors de Campos con Pebres del piquillo farcits de rap i mariscs y Forn de Sa Pelleteria de Palma con Doblegats de crema i albercoc. Además, las bodegas Galmés i Ribot de Santa Maria, Bodegues Ribas de Consell y Miquel Oliver de Petra ofrecieron sus vinos.
La mostra ha estado marcada por la nueva ubicación de la misma, el polígono de Son Rossinyol de Palma, donde, a pesar de que algunos se quejaban de la lejanía del recinto, los ciudadanos pudieron disfrutar de un lugar más amplio, fácil aparcamiento y un servicio inmejorable.
La fiesta de clausura será el próximo miércoles 2 de mayo en la caseta que compartirán el Ajuntament de Palma y la Associació de Restauració de Mallorca en la Feria de Abril.
R.D.
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