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Maria Antònia Munar es la presidenta del Consell de Mallorca y candidata de esta formación política a la institución insular por parte de Unió Mallorquina. Munar se presenta además como candidata al Govern balear, por lo que será la única candidata que encabece la lista al Consell y la lista al Govern. Ella asegura que sus rivales políticos son Jaume Matas y Francesc Antich, no Rosa Estaràs o Francina Armengol, por lo que no quiere entrar en debate con ninguna de las dos candidatas.

-Usted dice que se presenta a presidenta del Govern, ¿tampoco le hace ilusión presidir el Consell como a Jaume Matas?
-Me encanta presidir el Consell de Mallorca, que es el 80 por ciento del gobierno de las Islas. Pero los cabezas de lista del Consell de Mallorca siempre han sido los candidatos a presidente del Govern. Y UM no renuncia a nada. Tiene mucho que decir en materias como educación, sanidad, inmigración o seguridad.

-¿Qué opina de que Jaume Matas diga que no le hace ilusión?
-Entiendo que fue un alarde de sinceridad que no gustó a muchos mallorquines.

-¿Y de la jugada del president Jaume Matas de colocar a Rosa Estaràs como número uno al Consell?
-Es una jugada inteligente porque así no tendrá que hacer tantos esfuerzos. No tendrá que bajar al campo de batalla y otro le hará el trabajo.

-¿Le preocupa tener dos rivales en lugar de uno?
-La verdad es que no. Lo que me motiva realmente es poder encontrar soluciones en determinadas materias que ya he mencionado antes: la educación, la sanidad, la emigración y la seguridad, por ejemplo.

-Usted siempre ha tenido problemas con sus mensajes sobre inmigración e incluso se le ha acusado de xenófoba.
-El tiempo me ha dado la razón y los que me criticaron cuando hace años dije que era preciso tomar medidas ahora son los principales defensores de este asunto. A los políticos nos pagan para que nos avancemos a los problemas, para que pongamos remedio antes de que llegue la enfermedad. Se ve que no todo el mundo opina igual, pero al final muchos políticos me han dado la razón.

-¿Por qué le preocupa tanto la inmigración?, ¿qué riesgos le ve?
-Los tiempos van hacia un mundo cada vez más globalizado, con gente de todo el mundo en todas partes. Pero todo tiene un límite y, si se quiere preservar el territorio y la identidad, el crecimiento tiene que ser moderado. No se puede crecer más que aquello que seamos capaces de asumir para continuar dando calidad de vida a los que ya estaban y a los que llegan.

-Ha vinculado la inmigración a la protección del territorio.
-Todo está relacionado. Ordenación del territorio, políticas ambientales, de obra pública, de integración y de infraestructura sanitaria y educativa tienen que estar vinculadas. Los mismos que piden proteger todo dicen que no hay que poner límites a la entrada de inmigrantes y eso es incompatible.

-¿Qué destacaría de estos cuatro años en el Consell?
-Que se han dado soluciones a problemas que se arrastran desde hace muchos años. Se ha aprobado un Plan Territorial que dibuja el mapa del futuro; se han hecho carreteras, que eran imprescindibles en Mallorca; se ha acabado de forma definitiva el problema de los residuos... En el aspecto cultural, la política identitaria ha salido reforzado y estamos a punto de inaugurar el Teatre Principal.

-Considera positivas una serie de infraestructuras que se han hecho en esta legislatura, pero 50.000 personas se manifestaron hace unos días en contra.
-Los manifestantes dejaron claro contra qué y contra quiénes se manifestaban. Era contra una política del Govern que creen desmesurada y contraria al medio ambiente y al territorio. Las infraestructura son necesarias y se tenían que hacer, pero hay muchas maneras de hacerlo y la gente nos pide más respeto. También creo que la manifestación fue en contra de la corrupción y de los intereses de determinados colectivos.

-Habla de la corrupción. ¿Se ha sentido cómoda con sus socios, sobre todo en estos últimos meses?
-No me he sentido cómoda en esta última etapa, porque ha habido problemas de un calibre que nunca habían existido en esta Comunitat. Se han visto implicados cargos y alcaldes del PP y todo esto nos ha incomodado.

-No sé si a esta incomodidad urbanística se suma la de ver al PP manifestándose en la calle con tanta frecuencia.
-El PP se está dejando llevar por la extrema derecha. Eso crispa la situación, les aleja del centro y del modo de ser de los mallorquines. Los mallorquines no queremos crispación ni estar hablando de temas que nos afectan de manera colateral y que no son motivo directo de nuestra preocupación.

-¿Pero tendrá consecuencias en los pactos de la próxima legislatura o seguirá todo igual, con un pacto con el PP?
-Siempre hay que esperar y ver qué pasa en las elecciones. Espero que la gente sea responsable, analice lo que ha sucedido y vote en consecuencia.

-¿Qué cree que ha sucedido para que llegamos a la situación de ver a un alcalde en la cárcel?
-Creo que, desde algunos ayuntamientos, se ha llevado a cabo una política de corrupción y esto se ha visto clarísimamente en el caso del municipio de Andratx, pero también en otros municipios de la Isla en menor medida. Este problema sólo se puede erradicar de una manera: que los ayuntamientos se adapten y cumplan la legislación vigente.

-Pero si en algo insiste Matas es que son los consells quienes tienen la competencia urbanística.
-Es mentira. El Consell de Mallorca tiene la competencia en la planificación territorial, pero las licencias concretas las dan los ayuntamientos. Quienes han dado licencias, sin adaptarse a una normativa y estando en la prehistoria haciendo informes oscuros son los alcaldes, que son los únicos que lo pueden hacer. En ocasiones lo han hecho incluso con la participación de directores generales del propio Govern.

-Supongo que, para usted, también ha sido una legislatura dura, porque ha sido muy atacada. ¿Ha pensado en tirar la toalla?
-Me atacan porque no defiendo según qué intereses sino los de Mallorca. Si me hubiera plegado a los intereses de otros -permitir un parque temático, no impedir que se destruya patrimonio en la fachada marítima-, no me hubieran atacado. Todo esto me da ánimos para continuar y para dejar gente de futuro que no se pliegue a ningún interés extraño y, sobre todo, que sea valiente.

-Su política de subvenciones ha sido especialmente cuestionada.
-La política de subvenciones es súper transparente porque el Consell es la única institución que publica todas las ayudas. Lo que pasa es que no gusta que se den subvenciones a algunos colectivos porque se piensa que pueden ayudar a la causa. Esto no es así. Nosotros damos a subvenciones a todos, Asaja, por ejemplo, que está vincualda al PP y que recibe del Govern más subvención ella sólo que todos los colectivos del Consell. Las política de subvenciones del Consell es lo mismo que el gallinero de Miquel Angel March a la corrupción urbanística: nada de nada.

-¿Vistos los problemas que han creado alguna de sus actuaciones, cambiaría algo de lo que ha hecho en esta legislatura?
-No, creo que todo lo que hemos hecho vale la pena.

-Le pondré un ejemplo. ¿Subiría el precio de venta de Can Domenge?
-No, porque estoy convencida de que, cuando los mallorquines del futuro vean cómo queda el urbanismo en esta zona, con Jean Nouvel como arquitecto de prestigio internacional, verán que hay una forma diferente de plantear el urbanismo. Los políticos debemos valorar el territorio en su justo precio, no tenemos que especular con nuestros bienes y debemos dar a la gente una manera distinta de hacer urbanismo. No todo es dinero. Tener un urbanismo de calidad que pueda ser visto como ejemplo en todas las ciudades europeas creo que también es importante.

-Repite como candidata, pero ¿serán éstas sus últimas elecciones tras toda una vida en política?
-Nunca se sabe en política y, además, si lo supiera, no se lo diría. Empezamos una legislatura con ganas.

-Hablando de pactos, es cierto que, con algunos partidos de izquierda, usted lo tendría muy difícil para pactar. No le veo pactando con los verdes para formar un gobierno alternativo al del PP.
-Unió Mallorquina puede pactar con el PP y con el PSOE.

-¿En exclusiva, es decir, no estudia la posibilidad de un nuevo Pacte de Progrés?
-No. O PP o PSOE. No hay más opción.