A los sones del himno de Mallorca, "La Balanguera", se izó solemnemente la 'senyera'. Foto: TERESA AYUGA

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«No hacemos país para ir en contra de nadie ni para enfrentarnos». Con estas palabras, Maria Antònia Munar, presidenta del Consell, instó ayer a los mallorquines a participar en los distintos actos de la Diada de Mallorca con espíritu de «mallorquinidad» y como respuesta al el crecimiento demográfico «desbocado» que se registra en la isla. Munar presidió el acto celebrado en La Misericórdia en el que participaron casi todos los miembros de su gobierno, así como la vicepresidenta del Govern, Rosa Estaràs, la alcaldesa de Palma, Catalina Cirer, y el presidente del Parlament, Pere Rotger. Con motivo de la Diada de Mallorca, la institución que preside Munar optó por homenajear la bandera en un acto que se celebró en los jardines de La Misericórdia.

Durante su breve intervención, Munar instó a los inmigrantes a participar en los actos conmemorativos de la Diada «para mantener el espíritu de mallorquinidad y los símbolos de identidad». Munar dijo que la izada de la bandera de Mallorca era un acto «lleno de simbolismo» y pidió consideración y respeto por la senyera. La presidenta de la institución insular aprovechó el quinto aniversario de los atentados del 11 de septiembre para recordar que «durante los diez años de la Diada de Mallorca han sucedido muchas cosas, pero nada como aquel 11-S». «Los atentados de Nueva York han hecho cambiar las reglas del mundo», aseguró Munar. Precisamente, la Diada de Mallorca fue suspendida en 2001 cuando se conocieron las brutales consecuencias del atentado de Nueva York.

En su discurso, la presidenta del Consell de Mallorca reclamó que las «efemérides sirvan para que los mallorquines hagan piña en la defensa de nuestros símbolos», aseguró. Munar acabó su intervención con un «¡Visca Mallorca!» que fue secundado por prácticamente todos los asistentes. Tras su intervención, Munar entregó una insignia conmemorativa a los galardonados con las medallas de honor y gratitud de la isla de Mallorca. Todos los galardonados han sido distinguidos con los premios que ha concedido el Consell durante estos diez años de historia de la Diada de Mallorca. Aunque se registraron muchas ausencias, Munar entregó la distinción a una veintena de premiados, bien directamente o a familiares que los recogieron por la ausencia de los primeros. Tras la entrega de todas las medallas, Munar y las primeras autoridades políticas participaron en el homenaje a la bandera al son de La Balanguera, el himno de Mallorca. Un niño -Jaume Martorell- fue el encargado de izar la bandera de la isla mientras los jocs dels ministrils tocaban La Balanguera.