El municipio de Palma sigue perdiendo peso en la construcción
residencial en Mallorca como consecuencia de los elevados precios
del suelo y por el desarrollo viario, según afirmó ayer el
presidente del Colegio de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de
Mallorca, Jaume Gibert, quien indicó que la capital balear ha
pasado de centralizar el 55 por ciento de la edificación de
vivienda nueva a concentrar sólo el 25 por ciento en diez años.
El presidente del Colegio indicó que el valor de repercusión del
solar por vivienda se ha triplicado en el municipio de Palma en los
últimos tres años, circunstancia que ha generado que los precios de
los pisos sean inasumibles para un elevado porcentaje de la demanda
en la capital.
Tal y como adelantó este periódico, el número de proyectos de
viviendas visados por el Colegio de Aparejadores durante el año
pasado se situó en 8.977, frente a los 9.037 del año pasado, un
nivel de crecimiento que el presidente de la entidad, Jaume Gibert
Salamanca, calificó de «ideal» tras las fuerte caída y posterior
crecimiento motivados por las moratorias urbanísticas del Consell
de Mallorca. Aproximadamente un 60 por ciento de las viviendas
visadas obtienen el certificado de final de obra entre uno y dos
años después de haber sido visadas por el Colegio.
En cuanto a la tipología de la edificación, el balance
estadístico del Colegio de Aparejadores indica que durante el año
pasado visaron un total de 894 viviendas unifamiliares (chalets),
frente a los 936 del año precedente, los cuales se concentraron en
un 35 por ciento de los casos en los municipios de Calvià,
Marratxí, Manacor y Campos. Otro 25 por ciento se los repartieron
Llucmajor, Santanyí, Palma y Alcúdia.
Los proyectos de chalets adosados repuntaron el año pasado (612
viviendas) y superaron los niveles de 2004, circunstancia que el
Colegio atribuye a que quedaban proyectos con licencia por
ejecutar. Las viviendas se concentran en un 63 por ciento en los
términos municipales de Llucmajor, Campos, Palma, Marratxí,
Capdepera, Alcúdia y Santanyí.
Los proyectos de construcción de edificios plurifamiliares
(bloques de pisos) disminuyeron el año pasado un 12 por ciento
(1.138 edificios) tras casi duplicarse en 2004 como consecuencia
del levantamiento de la moratoria de plurifamiliares. De igual
forma, el número de viviendas previstas en estos bloques de pisos
(7.471) se redujo levemente durante el año pasado después de
haberse incrementado en más de un 100 por cien en 2004 (ver
gráfico).
La ubicación de estos edificios se concentran en un 75 por
ciento de los casos en los municipios de Alcúdia, Andratx, Campos,
Inca, Llucmajor, Manacor, Marratxí, Palma y Pollença.
El balance estadístico del CAATM indica por otra parte que
durante el año pasado también se redujeron en un 8'27 por ciento el
número de viviendas finalizadas con certificado de final de obra,
hasta una cifra de 6.270. Palma es el municipio con mayor número de
pisos y chalets terminados, seguido de Marratxí, Manacor, Llucmajor
e Inca.
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