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La Federación Empresarial de Comercio Turístico (Fecotur) afirma que la normativa que está aplicando el Ministerio de Sanidad de prohibir la venta de tabaco en los comercios y empresas de ocio y restauración, «provocará que está temporada cierren entre 1.200 y 1.500 comercios, de un total de 5.000 licencias de comercios turísticos, lo que supondrá una pérdida de entre 10.000 y 12.000 empleos», según anunció ayer el portavoz de Fecotur, José Tirado, tras la audiencia mantenida con el presidente del Govern, Jaume Matas, en el Consolat de la Mar.

Tirado explicó a Matas la discriminación de la que es objeto el comercio turístico con la actual Ley Antitabaco, que prohíbe la venta de tabaco en tiendas, licorerías y gasolineras, mientras que se permite su venta en otros sectores y zonas turísticas, caso de Canarias. El portavoz de Fecotur destacó el «apoyo que nos ha mostrado Matas, puesto que se ha comprometido a analizar esta cuestión para poder intervenir, más aún con las discriminaciones y trato de favor que se está dando a otros sectores».

Subrayó la existencia de un gran número de turistas que se desplazan expresamente hasta Mallorca para adquirir grandes cantidades de tabaco, puesto que en países como Inglaterra el precio del paquete alcanza los 9,7 euros, frente los 2,7 de España. «Esto generará la proliferación del mercado negro de cigarrillos en playas y semáforos de las Islas. Si no está resuelto este tema en un mes, convocaremos movilizaciones durante la próxima Semana Santa», afirmó.

El grupo parlamentario del PP, por su parte, remitió ayer un comunicado anunciando que hoy registrará una proposición no de ley en el Parlament en la que pedirá al Ejecutivo central que amplíe hasta 24 meses el plazo establecido en la disposición adicional tercera de la ley, que regula la venta, el suministro, el consumo y la publicidad del tabaco.

El PP considera que la «dificultad a la hora de adaptar los locales y la disminución de ingresos que puede provocar la prohibición total de venta de productos del tabaco en establecimientos de zonas turísticas» hace aconsejable «una flexibilidad en su aplicación» para dar un mayor margen en su aplicación.