Algunos de los niños saharauis, junto a la consellera Rosa Puig y el delegado Oualad Moussa. Foto: TERESA AYUGA/M. MONER

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La consellera de Presidència i Esports, Rosa Puig, recibió ayer a algunos de los 154 niños y niñas saharauis que están pasando dos meses en Balears. Los pequeños, que tienen entre 7 y 12 años, están acogidos por familias voluntarias de Mallorca y de Menorca. El acto consistió en un desayuno. La consellera quiso dar la bienvenida a los niños y a sus familias de acogida, a las que agradeció su colaboración en el programa «Vacances en pau». Rosa Puig subrayó la importancia de que los pequeños puedan recibir atención médica adecuada y afirmó que «lo que viven estos meses no lo van a olvidar en la vida».

Al evento también asistieron las directoras generales de Cooperació, Magdalena Contestí; de Menors i Família, Pilar Mir; el delegado del Pueblo Saharaui, Oualad Moussa, y Xavier Fortuny, presidente de la Associació d'Amics del Poble Saharaui. Fortuny expresó el deseo de que cuando regresen el año próximo «vengan de una tierra que sea suya».

La experiencia está resultando muy positiva, según comentan las familias de acogida. Margarita y Aina Olivé han acogido a Bachir, de 12 años. Para ellas, es su primera vez, no es así sin embargo para el niño, que ya ha pasado dos veranos en Sevilla y Canarias. En los dos días que Bachir lleva en la Isla han ido a la piscina y al Port d'Andratx. El mar parece ser uno de los lugares preferidos por los chavales. Es el caso de la pequeña Jadi, de 7 años, que ya ha conocido la playa junto a su madre de acogida, Antònia Bennàsser.

Deidré Dalmau