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La Federación de Nuevos Mallorquines nace en Palma con el objetivo de «normalizar y vertebrar la inmigración en la Isla», según su presidente, Jaime Salom Pizá. Mañana, viernes, se realizará -a las 20.00 horas- un acto de presentación en La Misericòrdia, donde se expondrán los principales objetivos de la asociación, cuya sede está en la calle Font i Monters, 27. La federación agrupa distintas asociaciones, entre otras, la Casa Colombiana-Mallorquina, presidida por Alba Giraldo; la Casa Ecuatoriana-Mallorquina, cuyo presidente es Manuel Simbaña; la Casa de Argentina, dirigida por Alfredo Scarfo; la Casa de Brasil en Mallorca, organizada por Carlos Venturelli, y la Asociación Rusa de Mallorca, presidida por Elena Dzahenbekova. Todos los presidentes de las asociaciones ejercen también como vicepresidentes de la federación. El director ejecutivo de la misma es Juan José Marí Morate; el gerente general es Francisco Sampol Antich y la secretaria, Ofelia Chávez.

El gestor Enric Oltra se encargará, además, del área de servicios sociales. Según Jaime Salom, «estamos aquí para ayudar a los inmigrantes, de cualquier país, en cualquier problema que puedan tener». La federación espera tener una filiación inicial de 10.000 personal, sobre un techo de 60.000. «En estos últimos seis años ha llegado mucha gente de otros países. La inmigración ha cambiado el mapa social de Mallorca. Pero ya es hora de que los distintos colectivos se unan, salven sus diferencias, y se sientan como lo que realmente son, nuevos mallorquines, sin distinción alguna. No en vano, los que ahora nos llamamos mallorquines también emigramos a América, y no conozco a ningún insular que no tenga un pariente lejano allí». Salom, siempre vigoroso y muy animado, se mostró ayer «entusiasmado» con el proyecto, en el se dará cabida también a mexicanos, eslavos, uruguayos, venezolanos y «todas» las nacionalidades que quieran sumarse al proyecto.

Además, la asociación ha anunciado la publicación en los próximos 15 días de un semanario con información puntual sobre los distintos colectivos y la realización de un programa de televisión, aunque no se especificó aún la cadena. La publicación se llamará, como la agrupación, «Nuevos mallorquines», y tendrá una amplia tirada. Dzahenbekova, responsable de comunicaciones de la federación, aseguró que «uno de nuestros objetivos es promocionar el arte, las costumbres, la música y el folklore de cada país. Creemos que es la puerta de entrada para conocer otras culturas y siempre es muy positivo dar a conocer cosas nuevas». Salom quiso reseñar ayer que «partimos de cero. Pero tenemos las ideas claras y queremos que la federación tenga una estructura eficaz, como si fuese una empresa, pero sin ánimo de lucro. Esperamos poder ayudar, normalizar la situación de muchas personas y fomentar la integración en esta tierra, que ha acogido con hospitalidad desde hace siglos a culturas diferentes. Esperamos contar con dinero público, que se destinará a actuaciones que refuercen los lazos de unión entre todos nosotros».