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Las ferias españolas facturan cada año unos 350 millones de euros y generan un efecto multiplicador sobre el sector servicios de aproximadamente 3.500 millones de euros, al tiempo que dan empleo directo a 1.500 trabajadores en España, según explicó ayer el presidente de la Asociación de Ferias Españolas, AFE, Juan Garaiyurrebaso, entidad que este año celebra su quinto congreso bienal en la ciudad de Palma.

El presidente de la asociación afirmó que los 350 millones de euros de facturación se corresponden con los 4 millones de metros cuadrados que contrataron los recintos feriales españoles durante 2004, lo que supuso un crecimiento con respecto al año anterior del 6,6 por ciento. El presidente de AFE precisó, no obstante, que la incidencia de su actividad en la economía es mayor, ya que los salones profesionales ponen en contacto a las empresas con sus clientes, por lo que negó que las ferias se limiten a alquilar espacio.

El presidente de Fires i Congressos de Balears y director general de Comerç del Govern, Francesc Tutzó, afirmó por su parte que en las Islas «es imposible crecer», dado que los recintos feriales de Mallorca y Menorca están ocupados año al máximo de su capacidad durante todo el año, circunstancia por la cual el Govern está buscando terrenos para construir en ellos un nuevo recinto ferial en Palma, que triplicará la superficie de 5.500 metros cuadrados de las instalaciones actuales.